viernes, 13 de marzo de 2009

El héroe ya tiene su medalla



Emoción, palabras de agradecimiento y una condecoración. Estos fueron los protagonistas de la jornada de ayer, que fue el día escogido para que la alcaldesa de Alzira, Elena Bastidas, le impusiera la Insignia de Plata de la ciudad a José David Rubio, un joven alcireño que salvó la vida de un bebé de 16 meses.

De esta forma, el héroe, como es considerado Rubio, ya tiene la medalla que reconoce su magnífica intervención ante los momentos de angustia que se vivieron el pasado 25 de febrero en un hipermercado de Carcaixent.

Cabe recordar que este joven salvó a una niña que se quedó sin respiración en una de las muchas cajas del hipermercado donde trabaja José David. Gracias a la maniobra de primeros auxilios que puso en práctica el alcireño Lucía volvió a la vida.

"No quiero pensar que en vez de salir todo bien, me hubiera quedado con la niña en los brazos", afirmó el vigilante de seguridad.

Sobre las doce y media del mediodía, José David Rubio llegó al salón de plenos del Consistorio alcireño acompañado por su padre, quien rebosaba satisfacción por la actuación de su hijo días atrás.

Este alcireño de 27 años, que trabaja como vigilante de seguridad en un supermercado agradeció a los miembros de la Corporación municipal este homenaje.

"Para mí es muy emotivo este reconocimiento. Doy las gracias por este acto a todo el Ayuntamiento y a la alcaldesa", aseguró Rubio.

Durante el acto, Bastidas señaló que José David es "un modelo a seguir para los jóvenes alcireños porque, además de su indudable valentía, ha demostrado su entrega, su implicación y su carácter de servicio a los demás, que le ha inculcado su progenitor que es Policía Nacional. Para el Consistorio es una satisfacción tener a personas como él".

Sin duda, un acto cargado de emoción al que también asistieron las concejalas de Servicios Sociales y de Sanidad, Lola Ortega y Mercedes Bañeres, respectivamente, así como, Carles Aranda, portavoz del Bloc.

Este vigilante de seguridad comentó que el miércoles recibió, en su lugar de trabajo, la visita de la pequeña Lucía, cuyos padres quisieron agradecer a este joven que hubiera salvado a su hija.

"Vinieron a vernos al hipermercado, tanto Francisco como Irina, nos dieron las gracias una y mil veces y me dijeron que no sabían cómo pagármelo. La forma de hacerlo es ver que la niña está bien", manifestó Rubio.

Y añadió que fue "una sorpresa, de repente los vi aparecer y la pequeña se me lanzó a los brazos para que la cogiera. Fue un momento muy bonito, una visita emotiva".

Por otra parte, la empresa para la que trabaja José David está estudiando la posibilidad de homenajear a este héroe.

Por su parte, Lucía cuenta desde hace unas semanas con un amigo muy especial, que un día le devolvió la vida.

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