La plantilla desmiente al Sergas y señala que desde el lunes el servicio queda sin vigilante nocturno durante la semana, a pesar del aumento de la agresividad de algunos pacientes
M.G. - VILAGARCÍA
Los hechos contradicen la versión oficial de la gerencia de Atención Primaria del Sergas sobre la potenciación del servicio de vigilancia en el servicio de urgencias del ambulatorio de San Roque. A partir de este lunes deja de trabajar durante la semana el vigilante jurado, dejando en total desprotección tanto al personal como a los usuarios del denominado Punto de Atención Continuada, PAC, de Vilagarcía.
Los cambios en el sistema del servicio de vigilancia practicados por Atención Primaria, tras la renovación de la contrata con la empresa no potencian la presencia de los guardajurados, como se indica desde el Sergas, sino que en el caso de Vilagarcía reduce la presencia de este personal en 40 horas semanales. Así lo ha puesto de manifiesto el personal de este centro médico que se siente totalmente desprotegido.
Los trabajadores manifiestan que la desprotección no sólo les afecta a ellos sino también a los usuarios que acuden al servicio de Urgencias. Como ejemplo de sus declaraciones indican que la pasada semana se produjeron tres intentos de agresión en este servicio, uno de ellos con arma blanca.
El penúltimo de los sucesos vividos en el PAC de San Roque se produjo en un momento en el que había unas cincuenta personas en la sala de espera. La agresión pudo evitarse gracias a la presencia del vigilante que logró reducir al agresor que no sólo intimidaba al personal sino también a los usuarios que esperaban ser atendidos.
Pacientes violentos
Los trabajadores del servicio de urgencias del ambulatorio vilagarciano denuncian que en este centro las amenazas, agresiones e intentos de agresión son constantes y que no siempre tienen relación con el aumento del número de personas que esperan ser atendidas. Incluso se llegaron a producir durante la tarde en días de semana, con gran riesgo para el personal porque en ese momento no hay vigilante.
Hay pacientes bastante habituales en este centro que tienen amenazados a los trabajadores, como el caso de una politoxicómana que incluso llegó a entrar al centro médico con una botella rota que esgrimió al personal para conseguir la medicación que buscaba y pudo ser reducida por el guardia de seguridad, mientras la plantilla llamaba a la Policía.
Otro toxicómano amenazó al equipo del PAC con un arma blanca. Los trabajadores señalan que la Policía acude bastante rápido a su llamada, pero sin la presencia del guardia de seguridad la agresión no podría evitarse, sería un hecho consumado.
En varias ocasiones, ante la presencia de uno de estos pacientes, o de alguno que parece ser conflictivo, el guardia de seguridad se mantiene atento y muy próximo al personal sanitario.
La situación de violencia que se vive en el área de urgencias del centro médico de atención primaria de Vilagarcía queda reflejada en el parte de incidencias que se remite al Sergas, razón por la cual los trabajadores expresan su malestar por la decisión de reducir aún más el servicio de vigilancia.
Nuevo horario
El nuevo sistema diseñado establece el servicio de vigilancia los viernes, sábados y domingos. El guardia de seguridad estará el viernes de diez de la noche a ocho de la mañana; y el sábado y el domingo de cinco de la tarde a ocho de la mañana. En festivos el horario se reduce de cinco de la tarde a diez de la noche. Hasta esta semana el servicio funciona de lunes a sábado de diez de la noche a ocho de la mañana y los domingos y festivos durante las veinticuatro horas, por lo que la reducción de horario es clara.
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