viernes, 20 de marzo de 2009

La plantilla del centro de salud exige vigilancia ante la mayor ´agresividad´ que padece


Los trabajadores protestan por quedarse sin guardia jurado en el turno de consultas
M. Q. - PONTEVEDRA
La plantilla del centro de salud Virgen Peregrina inicia una campaña reivindicativa con el fin de que se mantenga el servicio de vigilancia durante las horas de consultas. Éste, en marcha desde hace 20 años, se trasladará únicamente al turno de Urgencias y el personal del ambulatorio exige su continuidad ante la creciente “agresividad” que padecería. De hecho, Isabel Meijome, del sindicato CSI-CSIF, asegura que “hay amenazas muchos días”.
Un centenar de profesionales, entre personal médico, administrativo y de enfermería se concentró a las puertas de estas instalaciones durante cinco minutos como señal de rechazo a la retirada de la vigilancia. Una medida que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) hará efectiva a partir del próximo lunes. “El único vigilante que tenemos se lo llevan al servicio de Urgencias del Punto de Atención Continuada (PAC), donde también es necesario pero no a costa de dejarnos a nosotros sin seguridad”, señaló Meijome.
Episodios frecuentes
Esta portavoz afirma que la plantilla se tiene que enfrentar a situaciones de inseguridad con frecuencia. “Se producen amenazas y a veces te siguen por las calles” relató tras una movilización que también tuvo como objeto el recuerdo para la médica asesinada en Murcia a manos de un paciente recientemente. Tras indicar que nunca se ha vivido en el centro un episodio con tales consecuencias, sí detalló otros que sí resultan en cierto modo habituales.
“Quizás ayuda a generar conflictos el que, como este centro está muy masificado, y hay grandes colas para pedir cita, la gente muchas veces pierde los nervios, se enfada y arremete contra lo primero que pilla, que es el personal sanitario”, explicó Isabel Meijome. Asimismo, añadió que se da la circunstancia de que a este centro acuden a diario pacientes especialmente conflictivos, como toxicómanos en tratamiento que van a buscar metadona, y esto da lugar a “situaciones inicialmente difíciles de controlar que tienen mejor solución si está presente un vigilante”. Los trabajadores indicaron que si su demanda no es atendida realizarán otro tipo de protestas.
Por otro lado, en el Hospital también se desarrolló otra manifestación en memoria de la médica asesinada. En ella asimismo se hizo referencia a la necesidad de una mayor seguridad para los trabajadores sanitarios.

“Tenemos que tener dispositivos para prevenir problemas violentos”, indica el gerente

El gerente del centro de salud Virgen Peregrina también se sumó a las protestas de los trabajadores. Exigió al Sergas que dé la orden de que se mantenga el servicio de vigilancia y además Pedro Cabrera indicó: “Tenemos que tener los dispositivos para prevenir problemas violentos”. También hizo referencia al aumento de las situaciones que generan inseguridad en los centros médicos.
“En la sanidad también se reflejan los conflictos que hay en la sociedad”, puntualizó. Por su parte, el personal insistió en la idea y se asegura que “últimamente la gente está más agresiva y quiera conseguir las cosas de inmediato”. Recordaron que hasta ahora “tener a un vigilante recorriendo el centro ayudaba a disuadir este tipo de problemas”.

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