martes, 25 de agosto de 2009

Nacho García: “El actual modelo de centros de salud data de los 80, y es urgente cambiarlo”


El director gerente de Atención Primaria de Mallorca, asume el reto de reformar el sistema de funcionamiento del primer nivel asistencial
Juan Riera Roca
El doctor Nacho García Pineda es el director gerente de Atención Primaria de Mallorca, la red de centros y unidades básicas de salud en las que trabajan los médicos de fami lia, los pediatras, las enfermeras y los administrativos que resuelven el no venta por ciento de los p roblemas de salud que entran por las puertas de sus centros. La pieza fundamental de la sanidad está inmersa en un profundo cambio, coherente con el cambio social.




P.- Objetivo de esta legislatura es imprimir a la Atención Primaria una mejora sustancial. ¿Cuál ha sido el primer diagnóstico de la situación?

R.- Lo primero que hemos de tener en cuenta es que se ha transformado el modelo de sociedad. La población y sus necesidades de salud han cambiado y hemos de dar respuesta a esas nuevas necesidades. La sociedad ha cambiado y nos pide que cambiemos. No olvidemos que el actual modelo sanitario proviene de los años 80, no de 2009.

P.- Y en función de todo eso, ¿qué cambios son necesarios?

R.- Pues hemos identificado que tenemos una población de más edad, y que un 20% de la población de los pueblos y ciudades es de origen inmigrante. Todo eso condiciona una serie de elementos, como el tipo de asistencia, la cultura asistencial. Otro elemento que hemos identificado es que en estos 25 años la población ha sido educada en delegar la salud en el sistema sanitario. Y hemos medicalizado muchas situaciones vitales, como el duelo, que antes tenía un tratamiento social y ahora lo tiene médico.

P.- Todo esto habrá generado cambios…

R.- Todo esto lo que ha generado es un incremento en la demanda que con la bajada de los recursos es insostenible, como lo es que las personas deleguen en el sistema de salud toda la responsabilidad sobre la salud. Las personas han de ser corresponsables en este ámbito. Hemos de mejorar las relaciones con el ciudadano, con el paciente, quienes además cada vez están mejor informados.

P.- Da la impresión, pues, que en estos tiempos son muchas más las personas que van al médico.

R.- No nos interesa tanto cuánta gente va al médico sino que la atención que se les ofrece sea la que ha de ser; ofrecer una atención racional y correcta y que los profesionales desarrollen sus competencias en su máxima potencialidad.

P.- Pongamos un ejemplo.

R.- Pues el de las enfermeras, que son un colectivo universitario, que además en breve va a ver ascendida su profesión al nivel de grado. La población debe verlas como agentes de salud. Nosotros vamos a impulsar que desarrollen toda su potencialidad, de modo que nos ayuden a resolver muchos problemas en Atención Primaria, donde ya se resuelven el 90% de los problemas de salud. Queremos que esto continúe así y que mejore. Y las enfermeras pueden ayudarnos.

P.- Hablando de todo esto, ¿percibe correctamente la población que la Atención Primaria es la puerta de entrada del sistema de salud?

R.- La Atención Primaria es un nivel asistencial consolidado. Los usuarios saben que es un servicio próximo, siempre dispuesto, además de ejercer de abogados del paciente dentro del sistema sanitario, de orientarle. Cuando la paciente le sucede algún hecho trascendente lo confía aquí.

P.- Sin embargo, a las Urgencias de los hospitales siguen acudiendo muchas consultas banales o que podrían resolverse en la Atención Primaria.

R.- Es cierto. Uno de nuestros objetivos es mejorar y consolidar la accesibilidad. Tenemos los Puntos de Atención Continuada (PACs) en los pueblos. En Palma hay tres PACs. La accesibilidad al sistema de Atención Primaria es suficiente, buena, resolutiva y está consolidada.

P.- ¿Hay bastantes centros de salud?

R.- Hay los centros de salud que requiere la población. Desde que llegamos en 2007 hasta ahora hemos inaugurado seis centros de salud y cuatro unidades básicas de salud. Tenemos en marcha planes de remodelación integral de cuatro más y hemos proyectado ocho centros de salud nuevos que están fase de adjudicación y que esperamos que estén listos en un año o un año y medio.

P.- Aún así existe una percepción, aunque tal vez sea subjetiva, de que hay centros de salud saturados.

R.- Efectivamente, es una sensación subjetiva no recogida por la mayoría de los ciudadanos. Hemos preguntado a los usuarios por aspectos como las demoras, los horarios, la accesibilidad y no han identificado que haya saturación en los centros de salud. Es necesario desarrollar un plan de infraestructuras, pero no hay una sensación de que los centros de salud están saturados.

P.- Una vieja reclamación de los médicos de Atención Primaria es que tiene demasiadas cartillas sanitarias.

R.- Queremos avanzar en un sentido diferente. Los estándares miden las caretillas asignadas a cada profesional sanitario, pero no podemos ser tan rígidos. No es lo mismo tener asignados 1.600 cartillas en un barrio como Pere Garau, o tenerlas en una zona con menos demanda asistencial. El número de cartillas por profesional es una información útil, pero hay otras variables. Pero le diré las cifras: cuando llegamos en 2007 cada profesional tenía más de 1.900 cartillas. Tras dos años hemos incorporado más de 5º médicos y ahora son 1.600 cartillas.

P.- ¿Cree que es posible la demanda de que se puedan dedicar 10 minutos a cada paciente?

R.- Vuelvo a decir que hay que adaptarse a la realidad. Incluso la Plataforma 10 Minutos reconoce que esa demanda es un estándar. Algunos pacientes necesitan dos minutos y medio; otros, 20 minutos. Tenemos que avanzar en cómo relacionarnos, en la oferta de recursos, en cubrir las necesidades de la gente. Nuestro equipo conoce la población, el servicio de Atención Primaria. Conocer los aspectos cualitativos es el 50%, el otro 50% los datos objetivos. Hay que analizar la relación entre el paciente y el médico, las tareas y el tiempo.

P.- Hablemos de otro tema, las agresiones en el medio sanitario.

R.- Es un problema grave y esta gerencia ha apostado por reducir su impacto. Hay un plan de prevención de agresiones, elementos como pulsadores de alarma, cámaras de seguridad, vigilantes. Yformación a los profesionales para que sepan prevenir la violencia y manejar las situaciones si se producen. Una vez se han producido, los profesionales tienen todo nuestro apoyo legal, sanitario, psicológico.

P.- ¿Pero porqué hay medios, como el educativo o el sanitario, en los que parece que hay más agresiones?

R.- En los bancos se ponen pantallas de seguridad para aislarse. Es impensable que los médicos o los docentes trabajen con pantallas. Es imprescindible el contacto con el paciente, con el alumno. También hay que tener en cuenta que en seis millones de consultas al año, las agresiones son menos de media docena. Ysí, hay violencia. Ha habido un cambio cultural: la paciencia no es un valor en alza, queremos el ‘todo ya’ y si no se logra se genera una tensión que en ocasiones se convierte en violencia. Pero no solo en la sanidad. Nosotros hemos de tener en cuenta que además de personas predispuestas a la violencia son pacientes, son enfermos.

P.- De un tiempo a esta parte se desarrollan en los centros de salud actos médicos que hace años eran impensables.

R.- En Atención Primaria lo primero es cumplir con la cartera de servicios que tenemos asignada, pero además impulsamos que las consultas sean cada vez más resolutivas. Tenemos pruebas diagnósticas, monitorización de problemas arteriales, de pacientes con hipertensión arterial, realizamos espirometrías, diagnosticamos evoluciones de pacientes crónicos, de enfermos de EPOC o asma. Impulsamos que en los centros de salud se dé respuesta al control de los pacientes que toman anticoagulantes orales, que cada vez son más, algo que antes se seguía desde los hospitales.

P.- Avanzan, pues, en esta línea.

R.- Este años estamos estableciendo acuerdos con los hospitales para desarrollar programas de mejora del seguimiento de pacientes con problemas digestivos, neurológicos, nefrológicos, traumatológicos, dermatológicos, etcétera. Los hospitales forman a nuestros médicos o nos permiten tener acceso a las pruebas diagnósticas. Con ello logramos más resolución, más satisfacción.

P.- Ahora entra la Historia de Salud.

R.- Sí, y unifica el entorno de hospitales, centro sociosanitarios y de Atención Primaria, donde pueden utilizar esta aplicación informática para tener acceso a la información básica del paciente. E incluso está previsto que los pacientes puedan acceder a una parte de esa información. Pero no es la única novedad. Estamos impulsando la implantación de la receta electrónica que desde el otoño pasado funciona al cien por cien, con gran satisfacción de todos. Con la tarjeta sanitaria se puede recoger la medicación prescrita periódicamente, que se dispensará en la farmacia. El paciente no tendrá que pedir cita y hacer cola para poder recoger su medicina y nosotros, los médicos, no tendremos que dedicar horas a trabajar de escribientes a precio de médico.

P.- ¿Qué otras medidas se pondrán en marcha?

R.- Una apuesta por la calidad, dentro del Plan de Calidad del Govern balear. Disminuir la variabilidad en la práctica clínica, que el paciente reciba respuestas similares a problemas similares, procesos estandarizados. Desarrollamos la carta de servicios, que permiten decir cuáles son nuestros objetivos y qué indicadores medirán la consecución de esos objetivos. La gerencia ha desarrollado además un mapa de valores que recoge la visión que tenemos y nuestros valores. Con esa información y reuniones de alto nivel conoceremos las necesidades de nuestros clientes y podremos darles forma para desarrollar objetivos estratégicos. Ytodo ello en un sistema que creemos que ha de ser sostenible. En un sistema en el que se siga haciendo investigación.

No hay comentarios: