Hoy mismo ya no abrirá el establecimiento ‘Loop’, situado en Pau del Protectorat, a causa de los incidentes del pasado 8 de agosto. El bar estará inactivo, como mínimo, durante un mes
La Guàrdia Urbana de Tarragona ha cerrado, cautelarmente, 60 locales desde el pasado mes de marzo. Así lo confirmó ayer al Diari el jefe de la Policía Local, Rafel Comes, quien aseguró que la causa más frecuente es la no adecuación de la licencia a la actividad que están ejerciendo actualmente estos establecimientos.
De la totalidad de los cierres, 28 (46%) son del sector del ocio nocturno, mientras que 32 (54%) son de otras actividades comerciales. «Por zonas, la verdad es que en cinco meses hemos actuado por toda la ciudad, tanto en el centro como en los barrios. Eso sí, seis de los locales son de la Part Baixa», afirmó Comes.
El máximo representante de la Policía local indicó que la mayoría de actuaciones son a requerimiento de los vecinos. «Nuestro objetivo es que a partir de otoño ya empecemos a actuar de oficio», y añadió: «Cuando inspeccionamos algún local también nos centramos mucho en su salubridad».
Comes afirmó que la cifra de 60 cierres cautelares es considerable. «El objetivo es compatibilizar el ocio nocturno con el descanso de los residentes. Somos conscientes de que Tarragona es una ciudad turística, pero los establecimientos deben ser respetuosos con los vecinos», declaró Comes.
El ‘Loop’, también
Uno de los últimos locales que han visto interrumpida su actividad es el Loop, que está situado en la calle Pau del Protectorat, que hoy ya no abrirá. El motivo son unos incidentes que se llevaron a cabo el pasado 8 de agosto, y que han acabado con un informe «demoledor» por parte de la Guàrdia Urbana, según confirmó el concejal de Seguretat Ciutadana, Carles Castillo (PSC).
En el documento del cuerpo municipal se especifica que la Policía Local recibió quejas vecinales «a altas horas de la madrugada». El motivo fueron las «molestias por el ruido» existentes en la vía pública pasadas las 5.30 horas, que acabaron con varios incidentes entre los agentes y los sesenta presentes.
«Se produjeron lanzamientos de botellas de cristal, insultos, alteración del orden de la vía pública y la detención de una persona por agredir a un agente de la autoridad», reza el texto elaborado por la Guàrdia Urbana, el cual añade que en la inspección realizada al establecimiento se detectaron «varias» infracciones administrativas.
«El local realiza espectáculos sin contar con las licencias y autorizaciones pertinentes. Tampoco cuenta con extintores y la puerta de emergencia ni está señalizada ni es practicable», afirma el documento. Asimismo, la Guàrdia Urbana considera que el local «no tiene lista de precios», que los lavabos «no cuentan con la higiene necesaria», y que «se extrapola la actividad a la vía pública», que «el personal de acceso ejerce las funciones de vigilantes de seguridad» y que «hay infracciones en el horario de cierre».
Durante la misma noche los agentes denunciaron a varios jóvenes por «preparar y estar en posesión de sustancias estupefacientes, consumir bebidas alcohólicas en espacios públicos y originar desórdenes».
Carles Castillo declaró que el cierre provisional será por espacio de un mes, y que durante este tiempo el titular del negocio tiene tiempo para presentar alegaciones. «Vistos los hechos, el Ayuntamiento debía actuar de inmediato, ya que se trata de un establecimiento que ya tenía antecedentes», aseguró.
No hay comentarios:
Publicar un comentario