La tragedia se rozó ayer de madrugada en una conocida discoteca de Almoradí. Dos porteros del local fueron tiroteados por un hombre que enfureció después de que los empleados de seguridad no le permitieran acceder al interior. Al cabo de seis horas y media, el presunto autor de los disparos, de unos 30 años, fue capturado gracias a un dispositivo en el que participaron agentes municipales y de la Guardia Civil.
Los hechos se produjeron sobre las siete de la mañana. El sospechoso, un inmigrante sudamericano regularizado, trató de entrar en el local de ocio, pero los vigilantes no se le permitieron. Las razones no han trascendido.
En un momento del enfrentamiento, el hombre exhibió un arma corta con la que realizó dos disparos a corta distancia contra los porteros. A uno de ellos, de 27 años de edad, le causó una herida de bala en la rodilla. Su compañero, de 31 años, sufrió un impacto en el hombro, como indicaron fuentes sanitarias.
Las dos víctimas comenzaron a sangrar por las heridas y fueron auxiliadas por los testigos, que alertaron de inmediato a la Guardia Civil. Posteriormente, recibieron asistencia sanitaria en el Hospital de Torrevieja, al que fueron evacuados. A las pocas horas, recibieron el alta médica.
Los agentes se desplazaron a la discoteca del sur de Alicante y recabaron entre los testigos numerosos datos sobre la agresión. También recuperaron los casquillos y se entrevistaron con las víctimas y clientes del local para obtener una descripción precisa del autor del tiroteo.
No tardaron en identificar al sospechoso: el autor de los disparos era un joven de nacionalidad dominicana, casado y residente en Almoradí en situación regular. Al consultar los archivos policiales, descubrieron que posee antecedentes policiales por un delito de tráfico de drogas, como añadieron las mismas fuentes.
La Guardia Civil comunicó a sus patrullas los datos del sospechoso y comenzó una batida por el pueblo y sus alrededores. Agentes de la Policía Local también colaboraron en la localización del agresor.
Arrestado en la calle
Como resultado de este despliegue, el joven fue localizado y arrestado sobre la una y media de la tarde cuando caminaba por una calle que estaba cercana a su domicilio. Según explicaron los agentes que intervinieron en la detención, «no opuso ninguna resistencia y se pudo recuperar el arma con la que presuntamente realizó los dos disparos».
El dominicano está acusado de dos delitos de lesiones, permanece arrestado en el cuartel de la Guardia Civil y en las próximas horas será puesto a disposición judicial, como añadieron desde la Benemérita.
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