Concluye que el proyecto de obras de seguridad presentado por Olivo sólo busca "continuar" la edificación del centro y propone su "deconstrucción"
P. M El proyecto de realización de obras de seguridad en el centro comercial Nevada presentado por la promotora de Tomás Olivo ha sufrido un duro revés del perito judicial. El magistrado Miguel Ángel del Arco encargó al técnico que estudiara el informe para determinar si cumplía con los estrictos criterios por los que autorizó las obras de seguridad.
El ingeniero y catedrático de Urbanismo y Ordenación del territorio José Luis Gómez Ordóñez concluye en su pericial que el proyecto "no está interesado por otras alternativas de minimización de riesgos que no sean la de continuar las obras". Olivo presentó al juez dos informes firmados por el arquitecto Justo Rico Amat y el ingeniero de caminos Julio Martínez Calzón. Ambos concluían que en el Nevada debían ejecutarse obras urgentes para evitar daños a terceros. Básicamente proponían acabar los muros (todos, con la intención de ejecutar el cierre perimetral), atornillar las chapas de la cubierta, concluir las uniones de la estructura y poner todo el techo. Estos trabajos eran "absolutamente imprescindibles" para los técnicos y así se lo hicieron saber al juez.
Miguel Ángel del Arco trasladó el informe al perito judicial designado para el procedimiento. El catedrático de urbanismo califica como "alarmista" el proyecto de obras de seguridad del Nevada de Rico Amat y se queja de que el "cuidadoso cálculo de riesgos de las chapas de cubierta" que incluye en el texto "no va acompañado del señalamiento en los planos de los puntos analizados y de las distancias a las zonas exteriores a la obra", datos que el perito considera "exigibles" para determinar en qué consiste la previsión del riesgo a terceros. Otro de los reproches que expone es que la preocupación por los riesgos "debería comenzar por evitar los más inmediatos". El perito judicial se refiere a la seguridad de los vigilantes que custodian el recinto paralizado. Una de las medidas que propone es decretar "unas normas de seguridad" para estos empleados que les impida pasar bajo las estructuras peligrosas.
La "deconstrucción". El informe pericial remitido al juez rechaza la intención de ejecutar los trabajos solicitados por General de Galerías Comerciales. El experto al que ha recurrido el instructor reconoce que "hay dos caminos" para evitar el riesgo: "Acabar la obra, que es el razonamiento insistente de la promotora y sus técnicos o deconstruirla, especialmente en las partes más frágiles". El perito apuesta por la eliminación de los elementos del Nevada que puedan generar problemas de inseguridad. Esto implicaría, en caso de que lo acepte el juez, desmontar –por ejemplo– las chapas de la cubierta, todo lo contrario a las pretensiones de Tomás Olivo.
También recomienda medir y cuantificar las grietas y los desperfectos mediante una auditoría técnica que sirva para evaluar el progreso del deterioro durante la paralización de las obras. El juez Miguel Ángel del Arco tendrá que decidir ahora si autoriza o no las obras de emergencia.
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