Anecdóticas hace una década, ahora la agresiones contra el personal de centros sanitarios son una constante y dolorosa realidad. La violencia, verbal y física, en centros de salud y hospitales crece, y lo hace por la dificultad de una asistencia masificada, al amparo de una equivocada concepción del servicio público y gratuito y, sobre todo, como resultado de una pérdida de respeto al médico y a los trabajadores sanitarios en general.
Sanidad puso en marcha en julio del 2008 el registro de agresiones que, al menos, ha permitido contabilizar estos incidentes para poder conocer con el tiempo el comportamiento de estas conductas y su evolución. Así, desde entonces y hasta el pasado día 30 de septiembre, en tan sólo quince meses, los centros de salud y el Complejo Hospitalario de Palencia han constatado 25 sucesos agresivos que han sumado 32 víctimas. Aunque conocer la evolución es difícil, una comparativa entre los primeros ocho meses y estos últimos siete evidencia un claro incremento de estos sucesos, una tendencia que también se ha visto en el resto de las provincias.
Antes de que existiera este registro, los únicos datos recogidos son los de los colegios médicos y el sindicato Satse; pero estas organizaciones sólo contabilizaban los casos que les llegaban y de los profesionales concretos que defendían, médicos y enfermeros. El sindicato de Enfermería había registrado 28 en toda Castilla y León desde septiembre del 2001 a finales del 2005. Las cifras van en aumento y en Palencia se aprecia que 25 agresiones con 32 personas agredidas representa una media de dos agresiones al mes, una cifra que los profesionales consideran elevada si se tiene en cuenta la trascendencia que tienen este tipo de sucesos.
Para frenar esta situación que se da en todo el país, la Consejería de Sanidad puso en marcha un plan de medidas, pactado con los sindicatos del sector, que el 17 de noviembre ha incorporado la puesta en marcha del Observatorio. Además, esta estrategia contempla el asesoramiento y defensa jurídica, de manera que el seguro contratado por la Gerencia Regional de Salud cubre las contingencias las 24 horas del día con abogados en ejercicio, incluida la reclamación por daños y perjuicios y, en su caso, la defensa penal. En total, según los datos facilitados en la presentación de la campaña por el consejero de Sanidad, Francisco Javier Álvarez Guisasola, se han dictado 38 sentencias condenatorias en Castilla y León; de las cuales seis han sido calificadas como delito de atentado contra funcionarios públicos y, por lo tanto, con pena de prisión. Hay además otros 32 asuntos judiciales en trámite.
Sacyl también ha desarrollado una evaluación de riesgo en todos los centros, distribuido 55.000 dípticos con el protocolo de actuación, charlas informativas y 222 cursos con más de 5.600 participantes. También ha adoptado medidas preventivas concretas como la contratación de vigilantes de seguridad en 21 centros de la región, la instalación de cámaras y circuitos cerrados de televisión en otros 31; de botones antipánico fijos y portátiles, en 118; así como rondas de vigilancia y la implantación de sistemas de información en urgencias.
Cámaras de vigilancia
En Palencia, se han instalado cámaras en los centros de salud de Pintor Oliva, Villamuriel de Cerrato, Cervera de Pisuerga, Aguilar de Campoo, Barruelo de Santullán, Osorno, Saldaña y Guardo. En Atención Especializada, el mapa de riesgos incluye los servicios de Psiquiatría, en el Hospital San Telmo, y el de Urgencias, en el Hospital Río Carrión.
Además ha propuesto que la futura Ley de Ordenación y Planificación del Sistema Sanitario incorpore la posibilidad de la sanción administrativa que contemplará desde una infracción leve por el uso incorrecto de las instalaciones hasta las muy graves por resistencia o coacción.
En la provincia de Palencia, además de las agresiones directas al personal sanitario, se han producido en los últimos meses varios robos en el Complejo Hospitalario, lo que ha reclamado a los sindicatos a pedir que se potencien las medidas de seguridad. A finales del mes de octubre se produjo otro robo en las taquillas del personal que trabaja en el Hospital Río Carrión, el tercero en lo que va de año. Autores desconocidos abrieron las taquillas de tres celadores y sustrajeron diversos objetos personales. Unos días antes, también robaron dinero, ropa, calzado, móviles y otros objetos de diez taquillas del personal sanitario del Hospital San Telmo. En ese mismo centro, rompieron también una vitrina con instrumental médico antiguo y sustrajeron una televisión de plasma de una sala de visitas.
El primer robo ocurrió en abril, cuando desaparecieron objetos personales, entre ellos las llaves de un vehículo propiedad de una trabajadora que estaba aparcado en el propio centro y que desapareció. Sacyl ha garantizado a los trabajadores que en la adjudicación del próximo contrato de seguridad, algo inminente, exigirá medidas para evitar este tipo de actuaciones
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