Casualmente, la obra está frente a la casa del alcalde
Escribía Calderón de la Barca en una de sus comedias que "Casa con dos puertas mala es de guardar". En el caso de Torremolinos y parafraseando al escritor y dramaturgo del Siglo de Oro, habría que decir que "casa del alcalde con estatua enfrente, cara es de guardar". Eso es así ya que se ha hecho público que el Ayuntamiento de Torremolinos -con unas arcas municipales con graves problemas de liquidez- viene gastando anualmente más de 73.000 euros en vigilancia privada para una estatua del municipio que además, casualmente, se encuentra erigida frente a la casa del regidor del PP
Vigilar y pagar un "dos por uno" claramente es lo que Pedro Fernández Montes, alcalde de la ciudad costasoleña, habrá pensado para llevar años manteniendo tan costosa vigilancia desde hace tiempo. Habida cuenta del amplio número de estatuas existentes en la ciudad, si a todas se le aplicase esa onerosa labor de seguridad, faltaría presupuesto municipal para cubrirlo.
Contrato a una empresa de seguridad
La estatua ‘El rapto de Europa’ de Torremolinos puede presumir de ser uno de los monumentos mejores vigilados de la ciudad, ya que dispone de vigilantes jurados que diariamente guardan el monumento ante posibles ataques. Para ello, el alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, contrató, a través de la empresa municipal Samset, los servicios de una empresa de seguridad, que ha supuesto a las arcas municipales un total de 73.160,20 euros en el año 2009.
200 euros diarios
Según el candidato socialista a la alcaldía del municipio, José Ortiz -foto interior-, esto se traduce en un coste para los ciudadanos de Torremolinos “de más de 6.000 euros al mes y de más de 200 euros diarios los 365 días del año, un gasto excesivo para un fin que va más allá de una simple vigilancia de un monumento, ya que casualmente su ubicación está frente a la vivienda del alcalde”
Contrato a una empresa de seguridad
La estatua ‘El rapto de Europa’ de Torremolinos puede presumir de ser uno de los monumentos mejores vigilados de la ciudad, ya que dispone de vigilantes jurados que diariamente guardan el monumento ante posibles ataques. Para ello, el alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, contrató, a través de la empresa municipal Samset, los servicios de una empresa de seguridad, que ha supuesto a las arcas municipales un total de 73.160,20 euros en el año 2009.
200 euros diarios
Según el candidato socialista a la alcaldía del municipio, José Ortiz -foto interior-, esto se traduce en un coste para los ciudadanos de Torremolinos “de más de 6.000 euros al mes y de más de 200 euros diarios los 365 días del año, un gasto excesivo para un fin que va más allá de una simple vigilancia de un monumento, ya que casualmente su ubicación está frente a la vivienda del alcalde”
Aplicar el gasto a familias necesitadas
“Torremolinos no puede permitirse gastar más de 73.000 euros anuales en rondar una estatua cuando hay más de 8.000 parados en el municipio y ese dinero bien se podría emplear en ayudar a familias necesitadas y a emprendedores que generasen empleo”, señala el líder del PSOE.
Intento de videovigilancia truncado
Hace unos años, el primer edil de Torremolinos ya intentó instalar cámaras de videovigilancia en la zona donde se ubica esta estatua, en la calle Conde de Mieres. Pero en aquella ocasión el partido socialista denunció dicha instalación porque se había colocado sin ningún tipo de control ni sometimiento a la legalidad. Fue entonces cuando la Agencia Española de Protección de Datos dictó una Resolución el 28 de febrero de 2008 declarando la ilegalidad del procedimiento del Ayuntamiento, y éste se vio obligado a retirar las cámaras.
Zona cercada, casa segura y estatua vigilada
“Pero el alcalde no desistió en su propósito de mantener vigilada la estatua y de paso su casa, de ahí que se sirviera de la empresa Samset para mantener cercada esta zona ante posibles actos vandálicos”, cuenta Ortiz, que concluye diciendo que “no se puede permitir que el alcalde camufle sus verdaderas intenciones con esta vigilancia y engañe al pueblo en beneficio propio gastándose más de 73.000 euros de los contribuyentes en tener un vigilante jurado a las puertas de su domicilio”.
“Torremolinos no puede permitirse gastar más de 73.000 euros anuales en rondar una estatua cuando hay más de 8.000 parados en el municipio y ese dinero bien se podría emplear en ayudar a familias necesitadas y a emprendedores que generasen empleo”, señala el líder del PSOE.
Intento de videovigilancia truncado
Hace unos años, el primer edil de Torremolinos ya intentó instalar cámaras de videovigilancia en la zona donde se ubica esta estatua, en la calle Conde de Mieres. Pero en aquella ocasión el partido socialista denunció dicha instalación porque se había colocado sin ningún tipo de control ni sometimiento a la legalidad. Fue entonces cuando la Agencia Española de Protección de Datos dictó una Resolución el 28 de febrero de 2008 declarando la ilegalidad del procedimiento del Ayuntamiento, y éste se vio obligado a retirar las cámaras.
Zona cercada, casa segura y estatua vigilada
“Pero el alcalde no desistió en su propósito de mantener vigilada la estatua y de paso su casa, de ahí que se sirviera de la empresa Samset para mantener cercada esta zona ante posibles actos vandálicos”, cuenta Ortiz, que concluye diciendo que “no se puede permitir que el alcalde camufle sus verdaderas intenciones con esta vigilancia y engañe al pueblo en beneficio propio gastándose más de 73.000 euros de los contribuyentes en tener un vigilante jurado a las puertas de su domicilio”.
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