El dato publicado hoy por los Servicios Públicos de Empleo indica un nuevo repunte en las cifras de parados registrados ya que hay 84.985 personas más apuntadas como demandantes de empleo lo que supone un 2,4% más que en el mes de julio, llegando por tanto a los 3.629.080 desempleados registrados. Para UGT la situación del empleo en nuestro país es muy grave y exige una acción política consensuada, decidida y que actúe en el corto plazo y en el largo plazo. Por ello el sindicato considera imprescindible un plan de fomento de actividades económicas relacionadas con el cambio de modelo productivo, un plan nacional de políticas activas, que perfile y reoriente, mediante acciones formativas, a los desempleados de los sectores más castigados por la crisis, el mantenimiento de una política de protección a los trabajadores, atendiendo a los desempleados que agoten sus prestaciones por desempleo y actuar contra la precariedad del empleo que lleva a estas situaciones de desprotección.
Tal y como anunció el Ministro de Trabajo, el dato publicado hoy por los Servicios Públicos de Empleo indica un nuevo repunte en las cifras de parados registrados: hay 84.985 personas más apuntadas en los Servicios Públicos de Empleo como demandantes de empleo parados, lo cual supone un 2,4% más que en el mes de julio, llegando por tanto a los 3.629.080 desempleados registrados. Respecto al mismo mes de 2008 la cifra sigue siendo alarmante, pues se contabiliza 1.099.079 parados más, un 43,4% más.
Aumenta más el desempleo entre los hombres (con 47.863 parados más en el mes de agosto) que entre las mujeres (37.122), mientras los jóvenes desempleados suponen el 11,4% del total de parados.
Los extranjeros parados suman en este mes 6.462 más que en el anterior (un 74,3% más que en el mismo mes de 2008), situándose ya en los 488.570 parados.
Aumenta el desempleo en todos los sectores, de nuevo de manera principal, en el de la construcción (un 3% de desempleados más que el mes pasado). En términos absolutos, el mayor incremento mensual que se registra en el sector servicios (con 47.805 desempleados más que en el mes de julio), aunque habría que tener en cuenta el componente estacional de estos dos sectores.
El número de contratos registrados presenta una fuerte caída respecto al mes anterior, pues en este mes de ralentización de la actividad económica se han registrado 458.200 contratos menos que en julio. Con ello, el número de contratos acumulados en lo que va de años supone un 20,2% menos que los registrados en estas mismas fechas del año 2008. Cae en mayor medida el número de contratos indefinidos (un 38,2% menos que en julio y un 29,6% menos que agosto de 2008) frente a los temporales (un 32,2% menos, aunque sólo un 8% menos que en el mismo mes del año anterior). Con todo ello, la proporción de contratos indefinidos supone el 7,3% del total de contratos registrados en el mes.
Los datos del desempleo en el mes de agosto reflejan un fuerte un componente estacional, ya que durante este mes tradicionalmente se produce una ralentización en el ritmo de muchas actividades económicas como consecuencia de las vacaciones.
Se hace, por tanto, imprescindible continuar con la actuación a través de las políticas públicas, diseñando necesariamente un plan de fomento de actividades económicas relacionadas con el cambio del modelo productivo, verdadera senda de recuperación a largo plazo, con afianzamiento sostenible de la actividad económica y del empleo de valor añadido y alta capacidad productiva.
En este sentido, no se puede demorar la implantación de un plan nacional de políticas activas, que perfile y reoriente, mediante acciones formativas, a los desempleados de los sectores más castigados por las crisis, hacia los sectores con mayor proyección en el marco de un modelo productivo con sectores más innovadores, competitivos y que aporten mayor valor añadido a la economía.
A la reactivación de la economía mediante políticas públicas y la actuación a través de políticas activas del mercado de trabajo, hay que añadir el mantenimiento de una política de protección a los trabajadores, atendiendo a los desempleados que dejan de percibir prestaciones por desempleo por agotamiento de las mismas, en muchos casos, por haber cotizado durante un breve periodo de tiempo por ser contratos temporales.
Es necesario entonces actuar contra la precariedad del empleo que lleva a estas situaciones de desprotección, por lo que la reforma del mercado de trabajo y la recuperación de tipos de contratos temporales que ahondan en la desprotección y precariedad de los trabajadores, no son las medidas adecuadas para luchar contra el creciente desempleo.
Todas estas actuaciones requieren mantener el gasto público, por lo que será necesario aumentar los ingresos fiscales y plantear unos Presupuestos Generales para 2010 que sean verdaderamente eficaces, y creíbles.
La situación del empleo en nuestro país es muy grave y exige una acción política consensuada, decidida y que actúe en el corto plazo, protegiendo a los trabajadores desempleados, y en el largo plazo, en el marco del afianzamiento en una economía productiva que no se derrumbe ante crisis como la actual.
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