Los atuneros contratan a la empresa de seguridad del ultra José Luis Roberto para que les proteja
La autorización que el Gobierno ha dado para que los atuneros que faenan en el Océano Índico puedan llevar a bordo vigilantes privados provistos de armamento militar para defenderles de los posibles ataques de piratas supondrá un importante aumento del negocio para empresas de seguridad privada. La primera que se va a lucrar de esta oferta es la compañía valenciana Levantina de Seguros, propiedad del ultraderechista José Luis Roberto. Roberto, cabeza visible de la plataforma ultra España 2000, ha protagonizado varias polémicas a través de esta empresa, que hace unos años recibió contratos millonarios de la Generalitat valenciana. A su juicio, cada uno puede tener “la ideología que quiera” al margen de su actividad profesional.
La primera empresa que va a sacar tajada de la autorización del Ejecutivo para que los atuneros vascos que pescan en aguas del índico puedan llevar a bordo seguridad privada para prevenir los posibles ataques de piratas será Levantina de Seguridad, propiedad del ultraderechista José Luis Roberto. Según recoge Público, la compañía ya está seleccionando a 30 profesionales dispuestos a embarcarse en los atuneros que partirán al Índico, en los que podrán ir provistos de armamento militar, algo que hasta ahora tenían vetado las compañías privadas de seguridad.
España 2000, fútbol racista y vale tudo
El perfil de Roberto no es, precisamente, el de un moderado: es la cabeza visible de la plataforma España 2000, una formación ultraderechista que en los últimos comicios consiguió representación en dos ayuntamientos de la Comunidad Valenciana. A través de esta organización, Roberto ha organizado, entre otras actividades, campeonatos de fútbol xenófobos o cursos de vale tudo -una técnica de lucha libre extrema- para policías en algunos de los múltiples gimnasios que posee.
Contratos millonarios con la Generalitat
Con Levantina de Seguridad protagonizó en 2006, cuando salió a la luz que entre 1999 y 2004 la empresa había recibido contratos millonarios de la Generalitat valenciana. La empresa de Roberto recibió al menos 18 contratos, en su mayoría para encargarse de las labores de vigilancia de centros públicos como hospitales, institutos y otros organismos dependientes de varias consejerías.
Ideología y profesión
Pese a estos antecedentes, Roberto restó importancia a su ideología y trató de desvincularla de su trayectoria profesional. “El propietario tiene la ideología que le da la gana, vive en el sitio que la da la gana, es del club de fútbol que le da la gana y luego tiene otras actividades profesionales”, declaró a Público. Entre esas actividades, Roberto incluye sus empresas de seguridad o la asesoría jurídica de la Asociación Nacional de Empresarios de Alterne, es decir, la patronal de los negocios de prostitución.
"Ejercicio gratuito de irresponsabilidad"
Según dijo, su empresa “tiene 29 años de trayectoria y no ha recibido casi ninguna sanción”. “Asociar ideología a una empresa mercantil es un ejercicio gratuito de irresponsabilidad”, agregó, e insistió en su derecho a tener “la ideología que quiera” al margen de sus negocios.
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