PD).- El episodio de la Escopeta Nacional ya está completo. Pese a la insistencia del ex ministro de Justicia en puntualizar que la cacería se la pagaron ellos, Bermejo no dijo la verdad en sus declaraciones: un empresario pagó su cacería.
Según cuenta la revista Época, el empresario Lorenzo González Díaz corrió con los gastos de aquel fin de semana de principios de febrero en el que, coincidiendo con la instrucción del caso Gürtel, se reunieron Bermejo, Garzón, Dolores Delgado y Juan Antonio González García, en Jaén, tal y como contó esta revista en exclusiva.
Fue este empresario quien reservó la jornada de caza en la finca Navaltorno, propiedad de Santiago Peralta, y enclavada en la sierra de Andújar. Más de 500 hectáreas y venados a tiro de escopeta.
Un puesto en esta montería cuesta no menos de 4.000 euros por persona. En temporadas anteriores, llegó a los 5.000 euros. Bermejo insistió en que les había costado 1.000 euros.
El empresario en cuestión, Lorenzo González Díaz, es propietario de Seguridad LPM y de Emporio Nostrum. La primera, LPM, es una empresa de vigilantes, que se ocupa de la seguridad privada de algunos centros comerciales en Barcelona, y de algunas estaciones de Renfe, entre otros muchos clientes.
Precisamente en Renfe coloca también a su personal, a través de Emporio Nostrum, empresa de azafatas. Lo hizo en los trenes de cercanías de Barcelona en 2006, formando a 212 auxiliares que trabajan como informadores, desde que en ese año, siendo ministra de Fomento Magdalena Álvarez, se produjeran hasta 50 incidencias en 80 días, con manifestaciones de usuarios incluidas, reclamando un mejor servicio y más información.
Continuando con la administración pública: LPM de González Díaz resultó adjudicataria, junto con otras 12 empresas, del contrato de servicios de seguridad y vigilancia para los ejercicios 2008 y 2009, por parte de ADIF, el administrador de infraestructuras ferroviarias, por un importe total de 103,80 millones de euros.
Aunque ni en Renfe ni en LPM quisieron pronunciarse, parece que hace años que grupos de vigilantes armados patrullan las líneas más calientes de los trenes de cercanías. Se les conoció en su momento como Grupos Operativos de Protección, y sus miembros son algo así como una unidad de elite de seguridad privada.
El resto, ya es historia. El ex ministro aseguró que no dimitiría, y que el encuentro con el juez Baltasar Garzón fue una coincidencia. El dueño de la finca en la que cazaron el domingo, la de Cabeza Prieta, en el pueblo del magistrado, lo desmintió a esta revista.
Bermejo es hoy diputado por Murcia; Baltasar Garzón, eso sí, terminó de instruir el caso Gürtel; y de Juan Antonio González García, responsable de la Policía Judicial y cuyas iniciales aparecieron en las agendas de Roca, no se ha vuelto a saber públicamente nada
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