sábado, 3 de abril de 2010

Quejas en la Carrera Oficial al no poder entrar los carritos de bebés

El Plan de Seguridad obliga a dejar libre el espacio debajo de las sillas, donde otros años los padres guardaban las sillas_Hubo enfrentamientos con los vigilantes
La aplicación del Plan de Seguridad y Autoprotección elaborado por el Consejo de Cofradías a petición del Ayuntamiento trae de cabeza este año a los abonados de la Carrera Oficial que tienen niños pequeños. ¿El motivo? El lugar donde guardar los carritos de bebés, pues en ciertos momentos del día ha llegado a provocar hasta enfrentamientos entre los padres y los vigilantes de seguridad que, en cumplimiento de las órdenes recibidas no han dejado pasar los carritos a los palcos, ni a las sillas.
En años anteriores, los abonados entraban hasta su sitio y allí plegaban el carrito y lo guardaban debajo de sus asientos, pero este año no se les dejaba hacerlo. Los padres estaban indignados por la medida y se quejaban de no haber recibido un aviso en este sentido por parte del Consejo de Hermandades y Cofradías. Antonio Ferruz, uno de los abonados afectado por la nueva normativa dijo a ABC que se debía haber advertido de esta circunstancia antes de cobrar los abonos «para que supiéramos lo que podía pasar».
Los padres se resistían a aceptar las recomendaciones de los vigilantes de seguridad y en la tarde de ayer las discusiones a la entrada a los palcos por la parte del Banco de España se recrudeció hasta el punto de que tuvo que intervenir la Policía Local.
Ferruz explicó a ABC que una circular del Consejo de Cofradías explicaba que no se pueden estacionar los carritos de niños y explicó que los padres lo único que quieren es poder pasar hasta sus asientos para plegarlos allí y guardarlos debajo de las sillas como han hecho siempre.
Sin embargo, ahí parece estar la confusión. El vicepresidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, Carlos Bourrelier reconoció ayer que es la primera vez que se aplica esta medida y señaló que la prohibición de que entren los carritos de los bebés no depende del Consejo, sino del Ayuntamiento.
Según Bourrelier, los palcos y sillas no sólo deben estar libres en sus accesos, sino también en su interior, de modo que en caso de emergencia los asientos se puedan plegar con facilidad, cosa que sería imposible si debajo de ellos estuvieran guardados los carritos de los niños. Agregó que hay estacionamientos en los que los abonados pueden dejar los carritos y se les entrega un resguardo. En concreto hay cuatro ubicados en Plaza Nueva, Federico Sánchez Bedoya, Felipe Pérez (Plaza de San Francisco).
En las abundantes llamadas de denuncia recibidas en ABC, los padres se quejaban de que estos depósitos no tenían plazas suficientes. El vicepresidente del Consejo de Cofradías indicó que esta institución no tiene obligación de comunicar a los abonados la prohibición de entrar los carritos en los palcos, «porque de esta medida ya se ha informado en la prensa».

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