Langreo podría perder todas sus fiestas patronales. La razón es la aplicación, por parte del Ayuntamiento, de una normativa que data de 2002 y que el consistorio ha avanzado que este año ejecutará con «rigor». La norma, orientada a incrementar la seguridad en las celebraciones, les obliga a asumir los gastos derivados de la instalación de un boletín de enganche y la contratación de seguridad privada.
Los primeros cálculos que han hecho es que los gastos podrían alcanzar los 8.800 euros (la instalación del enganche oscila entre los 3.000 y 5.000 euros; la comprobación por parte de los técnicos, entre 500 y 800, y la contratación de seguridad privada, entre 2.000 y 3.000 euros). Para las sociedades de festejos, se trata de una inversión «superior a la cantidad que vamos a ganar». «Son gastos que no podemos asumir», añadían ayer los responsables de las entidades.
Ante esta situación, decidieron ayer pedir una reunión urgente con el Ayuntamiento para buscar una solución a la aplicación de este plan.
Mientras tanto, fuentes municipales manifestaron que «tenemos que hacer cumplir la normativa porque, si ocurriese algo serio, tanto la sociedad de festejos como nosotros seríamos responsables».
Sin más subvenciones
Los representantes de los festejos langreanos mostraban ayer su malestar, puesto que esta situación no viene respaldada por un incremento en las subvenciones municipales para fiestas. Así explicaban que «a algunos nos ayudan con cien euros y ahora nos piden que gastemos más de mil».
Desde estas sociedades sin ánimo de lucro se quiere llegar a un entendimiento con el Consistorio, pero algunos han asegurado que «si no nos ayudan, es posible que en 2010 se suspendan todas las fiestas en Langreo». «No pretendemos que retiren la normativa; si se hay que cumplirla, lo haremos, pero no podemos asumir los gastos», argumentaban.
Y es que todas las sociedades han hecho números, pero no les salen las cuentas. «Muchas no tiene apenas beneficios, pero trabajan para que su barrio no quede sin fiestas y ahora pueden obligarnos a que desaparezcan», afirmaban. A la vez recordaban que «somos muchos los que hacemos todo lo posible por que salgan adelante sin cobrar nada y no podemos poner dinero encima».
Según explican, estas sociedades ya asumen un importante gasto porque la mayoría coloca una carpa para no tener que suspender los festejos en caso de mal tiempo. «Se trata de algo habitual», recordaban los presidentes de las mismas.
El contratar ahora seguridad para las celebraciones, les supondría un gasto extra «demasiado elevado».
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