El acusado de violar a una niña en Alfonso Molina ya cumplió una condena por abusos

El sospechoso, de 43 años, estuvo en prisión ocho años por hechos similares. El hombre admitió haber hablado con la menor, pero negó haberla llevado detrás de un matorral y haberla violado

TANIA SUÁREZ | A CORUÑA El hombre de 43 años acusado de violar a una niña de 14 años disminuida psíquica en una fuente situada en las inmediaciones de la estación de autobuses ya había sido condenado por un delito de agresión sexual. El imputado, que está interno en el centro penitenciario de Teixeiro, le contó a la juez que investiga los hechos que ya había cumplido ocho años de cárcel por abusar de una mujer y negó haber violado a la pequeña.

El sospechoso afirmó ante la magistrada que no conocía a la menor y que ignoraba que fuese disminuida psíquica. El individuo subrayó en su última declaración, antes de que se celebre el juicio, que no hizo "nada" y que es "inocente" de los hechos que se le imputan. El procesado prestó ayer estas declaraciones en el Juzgado de Instrucción número 5 de A Coruña, que está a punto de concluir su investigación sobre los hechos, que sucedieron en septiembre del año pasado.

El imputado, que es natural de Palas de Rei (Lugo), dijo que el día en el que se cometió la violación estaba en la ciudad porque había estado trabajando en el desmonte de las casetas de la feria del libro instaladas en los jardines de Méndez Núñez. La juez también envió a prisión a un hombre de nacionalidad eslava, acusado de cooperar con el autor de la violación. Los dos procesados admitieron en las primeras declaraciones que prestaron tras ser detenidos que hablaron con la víctima, pero aseguraron que solo les pidió una toalla para secarse y que no sucedió nada más. El principal testimonio que imputa a los sospechosos es el del hermano de la niña, ya que la menor apenas dijo nada.

El niño, que tiene once años, relató que su madre los dejó en la fuente mientras iba al supermercado. En ese momento, siempre según la versión del pequeño, se acercaron a ellos dos hombres y una mujer, y uno de los individuos se llevó a su hermana tras unos matorrales mientras los otros lo sujetaron y le introdujeron galletas en la boca.

El menor aseguró que preguntó a sus agresores por la niña y que la mujer le dijo que la dejase porque su amigo iba a acostarse con ella. El pequeño consiguió huir hasta donde estaba su hermana. Afirmó que la vio tumbada y desnuda y que el hombre estaba encima de ella. El niño corrió hasta la estación de autobuses, donde pidió ayuda a uno de los vigilantes de seguridad, que telefoneó a la madre de la víctima. La mujer denunció los hechos y alertó a la policía.

Una patrulla se desplazó hasta la fuente, situada en los jardines de la avenida de Alfonso Molina, entre la estación de autobuses y la gasolinera, y detuvo a los tres acusados, que no opusieron resistencia. La mujer, que era la pareja de uno de los sospechosos, quedó en libertad tras prestar declaración en los juzgados.