N. VIZOSO, S/C de Tenerife
La Junta de Seguridad Local celebrada ayer en el Ayuntamiento de Santa Cruz determinó que la parada final del tranvía durante las noches del Carnaval será la situada en la plaza de La Paz. Tras analizar las distintas alternativas propuestas (puente Zurita, La Paz o la plaza Weyler), la empresa que gestiona el tranvía, Metropolitano de Tenerife SA (MTSA), así como las administraciones que conforman la Junta de Seguridad Local (Subdelegación del Gobierno y ayuntamiento), han concluido que la zona de La Paz es la que reúne las mejores condiciones de seguridad para instalar el recinto especial de acceso al tranvía.
De esta forma, el tranvía bajará hacia la plaza de La Paz y volverá a cargar al pasaje que quiera volver hacia La Laguna en el mismo sentido de llegada, por lo que realizará el cambio de agujas para recuperar la vía normal de subida a la altura de la rotonda 29 de Mayo, en la avenida General Mola y pasada la parada del puente Zurita, principalmente para evitar el riesgo de atropello dada la afluencia masiva de usuarios.
Así, la parada del puente Zurita, exclusivamente en las noches del Carnaval, estará inoperativa para poder subir hasta la rotonda 29 de Mayo por las vías de bajada y en ese punto realizar el cambio de agujas para seguir subiendo hacia La Laguna en el sentido normal.
A ello se añade la instalación de un recinto circundado por vallas de dos metros de altura al que se accederá por medio de tornos para cancelar el billete antes de subir al tranvía y que está valorada en 30.000 euros. Con ello se consigue que a la parada de La Paz sólo acceda la cantidad de personas que MTSA estima viable para certificar las condiciones óptimas de seguridad, que son entre 400 y 450 personas como máximo. Así, el control de acceso al tranvía se realizará mediante tornos que contarán el número de personas que suben al tranvía. Cuando se sobrepasen las 450 personas, los tornos dejarán de funcionar y los demás usuarios deberán esperar a que llegue un nuevo tranvía, que, como en la anterior edición del Carnaval, estará compuesto por módulos dobles. El tiempo estimado de paso entre paradas será de doce minutos en las franjas horarias de mayor congestión.
Asimismo, se consigue aminorar la presión de gente en las cercanías del andén y, de paso, servirá para atenuar algo el nivel de fraude, aunque desde MTSA esgrimen que ésta es sólo una consecuencia del objetivo principal, que es el de mejorar la seguridad del servicio.
En la Junta de Seguridad Local estuvieron presentes el subdelegado del Gobierno en Canarias, José Antonio Batista, el concejal de Seguridad Ciudadana y Vial, Hilario Rodríguez, el responsable de Seguridad y Calidad de MTSA, José Chinea, así como los mandos policiales de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado (Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local y el Cuerpo General de la Policía Canaria).
La coordinación de todas las fuerzas policiales hará que la Policía Local destine cien agentes a velar por la seguridad en el cuadrilátero carnavalero, a lo que se unirán 30 agentes de la Policía Nacional. Además, existirán dos destacamentos fijos: uno en los alrededores del cine Víctor, compuesto por entre 12 y 18 agentes de la Policía Nacional, y otro en el Intercambiador de Transportes, en cuyo caso los efectivos de la Policía Nacional nunca bajarán de seis agentes.
A ello se debe añadir la seguridad privada de MTSA, que contará con 25 vigilantes en el interior de los tranvías que contarán con el apoyo policial y el de las cámaras de seguridad, gracias a las que se estará en contacto permanente con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Por último, determinadas paradas de guagua de Añaza, Ofra o la Cuesta de Piedra estarán atendidas por los cuerpos policiales debido al alto número de personas que en determinada franja horaria se concentran en ellas.
La Junta de Seguridad Local celebrada ayer en el Ayuntamiento de Santa Cruz determinó que la parada final del tranvía durante las noches del Carnaval será la situada en la plaza de La Paz. Tras analizar las distintas alternativas propuestas (puente Zurita, La Paz o la plaza Weyler), la empresa que gestiona el tranvía, Metropolitano de Tenerife SA (MTSA), así como las administraciones que conforman la Junta de Seguridad Local (Subdelegación del Gobierno y ayuntamiento), han concluido que la zona de La Paz es la que reúne las mejores condiciones de seguridad para instalar el recinto especial de acceso al tranvía.
De esta forma, el tranvía bajará hacia la plaza de La Paz y volverá a cargar al pasaje que quiera volver hacia La Laguna en el mismo sentido de llegada, por lo que realizará el cambio de agujas para recuperar la vía normal de subida a la altura de la rotonda 29 de Mayo, en la avenida General Mola y pasada la parada del puente Zurita, principalmente para evitar el riesgo de atropello dada la afluencia masiva de usuarios.
Así, la parada del puente Zurita, exclusivamente en las noches del Carnaval, estará inoperativa para poder subir hasta la rotonda 29 de Mayo por las vías de bajada y en ese punto realizar el cambio de agujas para seguir subiendo hacia La Laguna en el sentido normal.
A ello se añade la instalación de un recinto circundado por vallas de dos metros de altura al que se accederá por medio de tornos para cancelar el billete antes de subir al tranvía y que está valorada en 30.000 euros. Con ello se consigue que a la parada de La Paz sólo acceda la cantidad de personas que MTSA estima viable para certificar las condiciones óptimas de seguridad, que son entre 400 y 450 personas como máximo. Así, el control de acceso al tranvía se realizará mediante tornos que contarán el número de personas que suben al tranvía. Cuando se sobrepasen las 450 personas, los tornos dejarán de funcionar y los demás usuarios deberán esperar a que llegue un nuevo tranvía, que, como en la anterior edición del Carnaval, estará compuesto por módulos dobles. El tiempo estimado de paso entre paradas será de doce minutos en las franjas horarias de mayor congestión.
Asimismo, se consigue aminorar la presión de gente en las cercanías del andén y, de paso, servirá para atenuar algo el nivel de fraude, aunque desde MTSA esgrimen que ésta es sólo una consecuencia del objetivo principal, que es el de mejorar la seguridad del servicio.
En la Junta de Seguridad Local estuvieron presentes el subdelegado del Gobierno en Canarias, José Antonio Batista, el concejal de Seguridad Ciudadana y Vial, Hilario Rodríguez, el responsable de Seguridad y Calidad de MTSA, José Chinea, así como los mandos policiales de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado (Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local y el Cuerpo General de la Policía Canaria).
La coordinación de todas las fuerzas policiales hará que la Policía Local destine cien agentes a velar por la seguridad en el cuadrilátero carnavalero, a lo que se unirán 30 agentes de la Policía Nacional. Además, existirán dos destacamentos fijos: uno en los alrededores del cine Víctor, compuesto por entre 12 y 18 agentes de la Policía Nacional, y otro en el Intercambiador de Transportes, en cuyo caso los efectivos de la Policía Nacional nunca bajarán de seis agentes.
A ello se debe añadir la seguridad privada de MTSA, que contará con 25 vigilantes en el interior de los tranvías que contarán con el apoyo policial y el de las cámaras de seguridad, gracias a las que se estará en contacto permanente con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Por último, determinadas paradas de guagua de Añaza, Ofra o la Cuesta de Piedra estarán atendidas por los cuerpos policiales debido al alto número de personas que en determinada franja horaria se concentran en ellas.
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