Aumentan en un 25% las denuncias a usuarios por viajar sin billete
Barcelona. (EUROPA PRESS).- El Metro de Barcelona cazó cada día el año pasado a 13.200 personas que se habían colado sin billete, lo que supone el 1,1% del total de pasajeros, que ascienden a 1,2 millones diarios, explicó la presidenta de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), Assumpta Escarp, quien añadió que el perfil más común de infractor es el de un hombre joven.
En declaraciones a los periodistas, Escarp consideró el fraude como "una conducta minoritaria" pese a que creció en relación a años anteriores, cuando se situaba sobre el 1%, y dijo que el aumento no puede atribuirse a la crisis ni al paro. "Hay gente que puede sufrir el efecto de la crisis e igualmente pagar el Metro", defendió.
Según explicó la también concejal de Prevención, Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento, en 2009 los revisores controlaron el billete a 4,89 millones de pasajeros.
En una comparecencia en la Comisión de Seguridad y Movilidad a instancias de CiU, Escarp también dijo que aumentaron en un 25% las denuncias a usuarios por viajar sin billete. Aclaró que el año pasado incrementó un 20% el personal y cámaras para controlar el fraude y la seguridad, y avanzó que en 2010 se invertirán 18 millones de euros en la seguridad del Metro, cifra que se ha quintuplicado en la última década, explicaron en declaraciones a Europa Press fuentes de TMB.
La edil subrayó el incremento del control en las estaciones con más fraude, como hace Ferrocarrils de la Generalitat (FGC). Destaca la de Passeig de Gràcia, donde confluyen las líneas 2, 3 y 4 de Metro, que tiene muchos accesos y está conectada con la estación de tren. No obstante, la línea donde se cuelan más los barceloneses es la 1, que también es la que tiene más pasajeros.
Además de haber más personal en las barreras de acceso, los agentes de seguridad actúan en las entradas y próximamente empezará una campaña para concienciar sobre qué supone no pagar. A ello se suma un plan para eliminar los tornos de entrada en las estaciones más conflictivas y sustituirlos por barreras con puertas de vidrio.
El edil de CiU Eduard Freixedes reclamó a Escarp que anuncie el calendario para sustituir los tornos por puertas, que dificultan que los viajeros puedan "colarse con la técnica del empujoncito". Añadió que hay horas en que "nadie" controla el fraude en las estaciones del Metro, y vio insuficiente el incremento en la multa mínima de 10 euros y que se sitúa en 50.
Escarp argumentó que los equipos de seguridad trabajan aleatoriamente en diferentes estaciones y que la red de Metro consta de 3.306 cámaras conectadas con la policía, que pretenden junto con los vigilantes de seguridad, disuadir y prevenir el fraude. Hacia 2012, los transportes del área de Barcelona eliminarán los billetes de cartulina de acceso a los trenes y autobuses por las tarjetas de contacto, al estilo de las targetas de crédito, que se pasarán por un lector.
El proceso obligará a cambiar todas las validadoras de entrada y salida del Metro, que podría obligar a pasar la tarjeta a la salida.
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