Un juzgado de Motril ha impuesto dos años de prisión y 720 euros de multa a un vecino de esta localidad por amenazar, insultar y agredir al personal del Servicio de Urgencias del Hospital Santa Ana de Motril.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, los hechos ocurrieron sobre las 23.30 horas del pasado 23 de junio cuando el acusado se dirigió a la sala de espera de urgencias del hospital y comenzó a increpar a voces a los celadores. El celador encargado del turno intentó calmarlo, pero el acusado le respondió con un fuerte empujón y luego lo agarró por el cuello hasta que los separaron el resto de celadores del hospital, que también resultaron lesionados.
Por su parte, el vigilante de seguridad trató asimismo de reducirlo, por lo que el acusado lo amenazó y le propinó un fuerte empujón en el pecho. Cuando llegaron los agentes de la Policía Nacional, ofreció resistencia para ser detenido, de manera que le arrancó de un manotazo un botón de la camisa a uno de ellos y arañó en un brazo al otro.
Una vez que se encontraba ya en dependencias policiales, el acusado volvió a propinar un fuerte golpe a un agente en el pecho con lo que le arrancó la placa insignia de la camisa.
Lesiones y arañazos
Según la sentencia, como consecuencia de las agresiones un celador resultó con lesiones y arañazos en distintas partes del cuerpo, y otros dos con varias erosiones.
Además de las penas impuestas, el acusado deberá hacerse cargo de todas las costas procesales e indemnizar con diferentes cantidades a los celadores que se vieron afectados.
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