Vecinos insisten en pedir cámaras de seguridad tras el rechazo de una proposición de CiU.
El Ayuntamiento de Barcelona ha pedido a Adif con el consenso de los vecinos del Clot que ponga un vigilante privado de noche en las obras del túnel del AVE en el barrio, según explicó hoy la concejal de Prevención y Seguridad, Assumpta Escarp, quien admitió que el nivel de exigencia del Consistorio a Adif debe ser "mayor y continuado".
Lo dijo en el debate de la Comisión de Seguridad y Movilidad en el que se trató la posibilidad de instalar cámaras de seguridad en la calle a partir de una proposición de CiU, que las pedía en el Clot, y una del PP, que reclamaba estudiar las zonas susceptibles de instalarlas tras la demanda de vecinos de Trinitat Vella y la colocación de falsas por vecinos del Gòtic. Ambas fueron rechazadas por el bipartito y ERC.
En declaraciones a Europa Press, un portavoz de Adif aseguró hoy que "siempre ha habido vigilancia en el interior de las obras", y explicó que se ha incrementado fuera del vallado de los trabajos el patrullaje de noche de los agentes de seguridad privada contratados por la constructora.
Escarp añadió, en declaraciones a los periodistas, que antes de Semana Santa se reforzó el patrullaje preventivo de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana en la zona, sobre todo entre las 18 horas y las 22, cuando oscurece y cierran las tiendas, y que se alarga hasta la 1 de la madrugada.
Además, se ha bajado la valla hasta 1,40 metros para tener más visibilidad. Escarp añadió que han pedido más puntos de luz que se instalarán en breve, poda de árboles y más limpieza. El Ayuntamiento trabaja con Adif para definir más medidas en una zona donde se ha producido un apuñalamiento y el atraco de una joyería esta semana, que terminó con la comerciante hospitalizada.
Sin embargo, por ahora, el Ayuntamiento no se plantea cámaras en el Clot. Escarp lo justificó con la explicación de que ya se trabaja para "minimizar los efectos" de las obras. Tampoco estudiará otras zonas susceptibles, lo que criticaron Alberto Villagrasa (PP) y Joaquim Forn (CiU), que defendieron que la seguridad aumenta con las cámaras, aunque Forn matizó que no es el único método.
Eduard Freixedes (CiU) dijo que hace tiempo que los vecinos del Clot oyen mejoras en el alumbrado y apostó por cámaras conectadas las 24 horas con la policía --como en el Metro-- en calles como Mallorca y Clot, y recibió el apoyo del PP. Freixedes se preguntó por qué ICV-EUiA votó en contra cuando "ha convertido las comisarías del país en un Gran Hermano".
Joaquim Mestre (ICV-EUiA) advirtió de que las comisarías "no son la calle" y las cámaras han "erradicado" las denuncias por maltrato de los detenidos. Ricard Martínez (ERC) rechazó la videovigilancia y, en relación a la demanda vecinal de cámaras en Trinitat Vella, dijo que problemas derivados del nivel social deben afrontarse con formación.
En declaraciones a los periodistas, el presidente de la plataforma AVE Pel Litoral, Pere Vallejo, defendió las cámaras como medida provisional, porque a partir de las 21 horas, "la gente ya no baja a la calle porque tiene miedo" y los negocios "están afectados por la seguridad". Lo ejemplificó con la gasolinera de la calle Mallorca, que ha sido atracada tres veces, la última el domingo pasado.
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