Ante la incapacidad de la Administración para asignar rápidamente las viviendas a familias necesitadas, Adigsa ha contratado a vigilantes privados que viven en un piso protegido y que patrullan las 24 horas para evitar que familias sin recursos entren a patadas en los pisos. En el bloque número 29 de la calle de Juan de Juanes, de L'Hospitalet, donde vivía el fallecido, una pareja de seguridad privada ha frenado las ocupaciones. La estrategia también se repite en los bloques de Favència 298-310 donde permanecen desocupados algunos pisos de alquiler protegido.
«Es una vergüenza que gasten dinero en pagar vigilantes privados 24 horas en lugar de agilizar los trámites para que las familias necesitadas puedan tener acceso a este tipo de viviendas», aseguró ayer un vecino de la calle de Juan de Juanes.
La empresa pública Adigsa, que abrió una demanda judicial contra la familia del hombre que se quitó la vida, anunció ayer que pedirá el aplazamiento cautelar del juicio por ocupación ilegal.
Adigsa pide a la familia 9.000 euros por haber ocupado la vivienda de forma ilegal. La empresa dijo ayer que mantenía abiertos otros ocho juicios a familias patadistas por la misma razón. Cuatro de ellas se enfrentan a desalojos inminentes en las próximas semanas.
CONMOCIÓN / El barrio del Gornal amaneció ayer conmocionado por la noticia del suicidio del hombre que vivía en un piso social de forma irregular. Su viuda, Eva V., de 37 años, teme quedarse sin piso, aunque Adigsa aseguró ayer a este diario que trabaja con el Ayuntamiento de L'Hospitalet para buscar una solución a la familia. La empresa pública de la Generalitat explica que cuando quedan pisos vacíos se avisa a los servicios sociales del municipio para que envíen un informe con las familias más necesitadas. El ayuntamiento tiene la decisión final sobre las familias que son merecedoras de una vivienda con alquileres reducidos (entre 100 y 400 euros).
Pero el proceso suele ser lento y cada vez que un piso queda vacío, las familias sin recursos se apresuran a entrar derribando la puerta. Los vecinos aseguran que hay viviendas que permanecen hasta más de un año vacías y las familias sin recursos manejan una lista con las direcciones de pisos. Adigsa niega que sea una situación generalizada.
10 EN SANT ROC / Junto al Gornal, Sant Roc de Badalona es uno de los barrios metropolitanos con más pisos protegidos okupados. Diego Justicia, presidente de la asociación de vecinos, tiene constancia de 10 viviendas. La asociación también ha denunciado que algunos entran para después alquilar los pisos y hacer negocio.
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