El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, ha calificado “de mala noticia” la ruptura de la reforma de la negociación colectiva, porque “la experiencia nos enseña algo muy contundente, todas las reformas que se han hecho por la vía unilateral de los gobiernos, en general, no han funcionado, mientras que todas las que se han hecho por la vía de la negociación y del acuerdo han funcionado razonablemente”. Méndez- que ha hecho estas declaraciones en el programa “En días como hoy” de RNE- ha expuesto los hechos que condujeron a la ruptura de la negociación sobre la reforma de la negociación colectiva. Así el documento aportado por la CEIM, la patronal madrileña, tras la celebración de la Junta Directiva de la CEOE, “marca una hoja de ruta en la que se recuperan temas que ya habíamos abandonado”.
Méndez ha afirmado que “en la patronal el planteamiento era toda a favor de su obra” y, aunque el presidente de la CEOE ha intentado conciliar esa posición con la búsqueda de un acuerdo, ha habido presiones muy fuertes desde el ámbito empresarial. “Unos pensaban que lo mejor era dar un paso en la dirección correcta juntos”, pero ha prevalecido la posición de los que pretendían utilizar “la bota de siete leguas y dar un paso de gigante” y que han observado que los requisitos exigidos por la UE a Portugal, se acomodaban a sus intereses, ante la hipótesis de que en nuestro país ocurra la mismo.
Asimismo, ha rechazado que se trate de utilizar como excusa la situación de las pequeñas empresas para defender los intereses de las grandes empresas. En este sentido, ha reconocido que le ha llamado la atención que el primero en defender la ruptura de este acuerdo haya sido el presidente del Consejo para la Competitividad y presidente de Telefónica, Cesar Alierta.
El Secretario General de UGT , que considera que la reforma de la negociación colectiva se tramitará como un proyecto de ley, ha solicitado al Gobierno y a los grupos parlamentarios que actúen “con tiento y con equilibrio” y sobre todo que no hagan demagogia y no intenten generar un espejismo planteando que la reforma de la negociación colectiva es la que va a resolver el problema del paro, “que no lo planteen así porque generarían falsas expectativas como generó la reforma laboral, o el plan de ajuste”, cuyos resultados están a la vista. Sólo cuando se recupere la actividad económica se recuperará el empleo y para ello es urgente resolver reformas todavía pendientes como la financiera, porque si no fluye el crédito no se reanimará la economía.
Méndez ha abogado porque se explique claramente a la opinión pública la verdadera situación, “tenemos un problema muy serio y muy profundo que en el corto plazo no va a tener una fácil solución y la obligación en la que estamos es en mantener la cobertura social- para evitar un mayor sufrimiento entre las trabajadoras y trabajadoras- en tomar iniciativas públicas, para contribuir a la generación de empleo y tender un puente para cambiar el modelo productivo”.
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