PATRICIA MUÑOZ
SANTA CRUZ DE TENERIFE En el primer trimestre del 2011 han robado casi 3.000 metros de cable de cobre en la isla de Tenerife. Esta actividad delictiva está en auge desde que comenzó la crisis financiera en 2007. Desde el Cuerpo Nacional de Policía aseguran que cada año se producen más detenciones y reciben más denuncias por parte de la empresas afectadas por el robo de este material.
Este tipo de infracciones no solo tienen lugar en la Isla sino que es un problema que se extiende por todo el territorio nacional. El precio del cobre en el mercado actual supera al del oro por lo que lo delincuentes tienen especial interés por este material. El valor ha subido más del triple desde el 2005, ya que en ese momento la tonelada costaba 2.238 euros y en la actualidad asciende hasta los 7.000 euros.
Además, acceder a este metal es más sencillo, pues se encuentra en grandes cantidades en cualquier tipo de obra. De todas formas y a pesar de que el robo de cobre va en aumento, colocar la mercancía robada no es fácil, porque las empresas que comercian con este material deben registrar administrativamente la procedencia del metal. En este sentido, la Policía solicita a estas compañías que colaboren en el momento que "sospechen de alguno de los clientes".
Desde que comenzó la crisis hace cuatro años y, con ella, el aumento de robos de cobre, los cuerpos de seguridad han detenido a un total de 11.800 personas en España. Han recuperado 625 toneladas del material robado, lo que supone 107 kilómetros de cobre y un valor en el mercado de casi cuatro millones de euros.
En cuanto a los robos en Tenerife, de los 3.000 metros que se han sustraído en los tres primeros meses del año, la Policía solo ha conseguido recuperar 500 metros. Agentes explican que es complicado "seguir el rastro de los ladrones" y que el valor de lo recuperado es de 6.000 euros.
Prevención
Además, en este corto periodo, la Policía detuvo a nueve personas, todas de nacionalidad española, y recibió 16 denuncias. A su vez, ha realizado en Tenerife un total de 36 inspecciones a los establecimientos que se dedican a la actividad de compra- venta de metales.
Tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil abogan por la prevención ya que para ellos es complicado estar en todas partes. Por este motivo elaboraron el Plan de Respuesta Policial al Robo de Cableado de Cobre. De esta manera, se ha incrementado el número de agentes dedicados a la vigilancia de estos delitos.
En este sentido, la Policía explica que ahora "mantenemos un contacto más directo con las empresas de compra- venta de metales y con las chatarrerías". Al tener mayor relación con los negocios, el cerco delictivo se reduce.
Desde el Cuerpo Nacional apuntan que este tipo de establecimientos, por ley ministerial, tienen la obligación de tener en "regla" los libros de registro. En estos documentos deben especificar la cantidad, el precio y la procedencia del material. En caso de que los libros "no cuadren", se procede a investigar de manera más profunda el negocio. En caso de encontrar alguna irregularidad, los dueños son sancionados.
Desde la Policía consideran esta labor de investigación de gran importancia, ya que se trata de una actividad relevante para la seguridad ciudadana. En este sentido, explican que la colaboración es necesaria a la hora de poder realizar las detenciones. También recomiendan a quienes regentan las empresas que, si sospechan de algún vehículo o cliente, se pongan en contacto con las fuerzas de seguridad.
Según la Policía Nacional, la manera que tienen los ladrones de actuar a la hora de realizar los robos es parecida en todos los casos. Los delincuentes acuden con herramientas especificas al lugar y, por norma general, transportan el cobre en furgonetas. Por este motivo, los agentes están, en la actualidad, sensibilizados con la vigilancia de este tipo de vehículos en puntos estratégicos.
Los lugares más comunes donde se cometen este tipo de delitos son las obras que carecen de vigilancia. La Policía no tiene competencia en estos emplazamientos y por ello consideran positivo que se instale seguridad privada. Otros lugares en los que se producen los robos son los polideportivos, subestaciones eléctricas, tomas de tierra, alumbrado público o explotaciones agrícolas.
Los robos suceden en toda la Isla pero el municipio de La Laguna es el más afectado en este primer trimestre. De hecho, de los 3.000 metros que se han robado en Tenerife, 1.950 metros proceden de esta localidad. Estos datos corresponden a los tres primeros meses del año, pero desde el 2007 Aguere ha invertido 70.600 euros para restablecer el cableado eléctrico. Al igual que la Policía, el Ayuntamiento lagunero pide colaboración a todos los ciudadanos que observen alguna conducta sospechosa.
No se trata de un hecho aislado. Por su parte, el Ayuntamiento de Los Realejos por culpa de esta actividad ha tenido que desembolsar 11.400 euros extra. Durante las obras de refuerzo del talud de la playa del Socorro sustrajeron 875 metros de cable, lo que ha supuesto al Consistorio un gasto no previsto en los presupuestos. Tuvieron que sustituir el cable por motivos de seguridad, ya que la playa no podía estar a oscuras.
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