Los sindicatos quieren que se cierren en Madrid el 29-S todas las escuelas infantiles, colegios e institutos
Cuando sólo queda una semana para el 29-S y cada vez son más las voces que rechazan la convocatoria de la huelga general, CC. OO. y UGT han advertido que «habrá muchos piquetes» que actuarán de forma contundente para «garantizar el derecho a la huelga».
EFE
Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo
El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, también se refiriró a la existencia de piquetes, pero del lado de las empresas, ya que existen «determinados sectores» que «coaccionan» a los trabajadores para evitar que secunden la huelga bajo amenaza de sanciones, despidos o impago de salarios vinculados a la productividad. «Eso sí es un piquete bien organizado para impedir que ese día la gente ejercite un derecho constitucional, que es el derecho a la huelga», dijo en Madrid.
Los sindicatos han amenazado también con no respetar los servicios mínimos que se fijen en el sector del transporte «si son abusivos», según declaró ayer el secretario de organización de UGT Confederal, José Javier Cuvillo. Además, subrayó que «la responsabilidad de lo que ocurra será del ministro José Blanco».
Fomento presentó ayer a los representantes de CC.OO. y UGT su propuesta de servicios mínimos, que dista bastante de la presentada por éstos el lunes. Así, el Ministerio quiere que opere el 25% de los vuelos nacionales e internacionales programados, el 20% de los trenes de larga distancia y AVE y el 30% de Cercanías. Los sindicatos exigen que no haya vuelos internacionales y solo uno nacinal entre los principales aeropuertos. Tampoco quieren que circulen trenes y, en Cercanías, un 25% en las horas punta.
Objetivo, paralizar Madrid
Donde han puesto «toda la carne en el asador» los sindicatos es en Madrid, feudo del PP. Las negociaciones con la consejería de Presidencia de la Comunidad madrileña están siendo muy duras, dadas las contundentes exigencias de CC.OO. y UGT.
Estos quieren que el 29-S no abra ningún centro de educación infantil, colegio e instituto, tanto público como concertado. Ni que haya transporte escolar. El Gobierno de Esperanza Aguirre ha planteado que en cada centro de enseñanza esté, al menos, su director, el jefe de estudios y un auxiliar de control para que puedan recibir y atender a los escolares que acudan al mismo.
En transporte, los sindicatos piden que el metro de la capital funcione al 25% entre las 6 y 9 horas y las 18 y 21 horas. El resto del día, sin servicio. La Comunidad de Madrid quiere que el suburbano circule al 30% durante toda la jornada, al igual que la EMT. En sanidad, se ha llegado a un preacuerdo para que los hospitales cuenten con el personal que hay un domingo o festivo y que los centros de atención primaria puedan atender las urgencias. Las negociaciones continuarán hoy, fecha en la que se conocerán también las propuestas de servicios mínimos de la Generalitat valenciana. Entre las voces que ayer rechazaron la huelga general cabe destacar a la CEOE, que ha pedido a las empresas que el próximo día 29 abran sus locales y negocios y que solo recurran al cierre de los mismos cuando peligren las instalaciones o los bienes de la empresa o se impida «gravemente» el proceso normal de producción. La patronal califica la huelga como «política», que además resulta «contradictoria, equivocada, incongruente, inoportuna, innecesaria, inútil y lesiva para los intereses de España y de las empresas y trabajadores».
La imagen de España
En parecidos términos se expresó el Instituto de la Empresa Familiar, para quien el paro «tendrá un efecto económico negativo, perjudicará la recuperación y la creación de empleo, empeora la imagen de España en el exterior dificultando el acceso a recursos financieros y eleva el clima de confrontación social, ya de por sí muy deteriorado».
En este sentido hay que añadir que el departamento de Exteriores del Reino Unido, el Foreign Office, ha lanzado una advertencia a los británicos que visiten España a finales de septiembre para que tengan en cuenta la «posible» huelga.
Asimismo, la Asociación de Empresas de Trabajo Temporal (Fedett), considera la huelga «incongruente, inoportuna, innecesaria e inútil, además de lesiva para los intereses del país así como de los trabajadores y de las empresas».
Dos de las asociaciones de autónomos más importantes, ATA y Conae, manifestaron ayer su rechazo a la convocatoria de los sindicatos.
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