Horas extras y pluses sin pagar, cambios de horarios injustificados y largas jornadas laborales son algunos de los elementos que han provocado que este sindicato, y los miembros del comité de empresa, denunciara públicamente esta situación. «Nos amenazaron con recortes en la plantilla si no aceptábamos sus condiciones», lamenta uno de los afectados que, al igual que el resto de sus compañeros, asegura llevar muchos meses soportando «duras presiones» por parte de esta empresa.
Desde UGT lamentan que Eulen esté socavando la calidad de un servicio que considera prioritario para el aeropuerto y advierte que, de continuar en este linea, podría verse seriamente afectado el buen funcionamiento del mismo. Y recuerda que una de las primeras acciones de protesta que se llevarán a cabo será, simplemente, «cumplir con la normativa». Algo que, denuncia, los vigilantes no pueden hacer con el actual ritmo de trabajo.
«En verano nos obligan a trabajar muchas horas seguidas y en invierno nos envían pronto para casa», exponen los trabajadores de esta empresa quienes denuncian la contradicción en la que ha incurrido ésta al decir que sobra gente y, en cambio, traer trabajadores de otros aeropuertos. «Es algo que ninguno de nosotros ha llegado nunca a entender».
Descartada por «poco realista» la opción de llevar a cabo una huelga, UGT y el comité de empresa se están planteando llevar a cabo otro tipo de acciones de protesta para mostrar su disconformidad con las «imposiciones» de la empresa y entre las que se incluiría «alguna pitada por el aeropuerto», colgar pancartas e informar a los pasajeros que vayan a coger algún vuelo.
Tampoco descartan formar un frente común con el resto de trabajadores aeroportuarios de las islas de los que sospechan también podrían estar sufriendo recortes similares puesto que, desde el pasado mes de diciembre, AENA está obligando a las concesionarias de sus servicios «a ajustar al máximo el gasto».
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