El movimiento sindical europeo se movilizará el próximo 16 de diciembre, en Estrasburgo, en contra de la directiva que pretende alargar la jornada laboral a 65 horas semanales. La manifestación se celebrará un día antes de que la Eurocámara tome una decisión definitiva.
Aunque ayer la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales del Parlamento Europeo votó en contra de extender la jornada laboral, por encima de las 48 horas semanales, el movimiento sindical europeo no quiere bajar la guardia. Por eso, el 16 de diciembre, un día antes de la celebración del Pleno de la Eurocámara, en el que se votará si se aprueba o se rechaza la directiva de las 65 horas semanales, la Confederación Europea de Sindicatos ha convocado una movilización en Estrasburgo. Esta movilización es una nueva oportunidad para expresar la oposición de los trabajadores a una directiva regresiva que atenta contra sus derechos. Y es que ya hace 91 años que la Organización Internacional de Trabajo consiguió que la jornada laboral se limitara a un máximo de 48 horas semanales, sin excepciones.
Aunque ayer la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales del Parlamento Europeo votó en contra de extender la jornada laboral, por encima de las 48 horas semanales, el movimiento sindical europeo no quiere bajar la guardia. Por eso, el 16 de diciembre, un día antes de la celebración del Pleno de la Eurocámara, en el que se votará si se aprueba o se rechaza la directiva de las 65 horas semanales, la Confederación Europea de Sindicatos ha convocado una movilización en Estrasburgo. Esta movilización es una nueva oportunidad para expresar la oposición de los trabajadores a una directiva regresiva que atenta contra sus derechos. Y es que ya hace 91 años que la Organización Internacional de Trabajo consiguió que la jornada laboral se limitara a un máximo de 48 horas semanales, sin excepciones.
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