Fomento finaliza la primera fase de la electrificación de la infraestructura, que incluye un tramo entre Cuenca y Siete Aguas
El AVE está cada vez más cerca. Los trenes empezarán a circular a mediados de año por la línea de Alta Velocidad de Levante, que conectará Madrid con Valencia. Lo harán en fase de pruebas, y para ello será necesario que se haya concluido toda la electrificación del trazado. El primer paso ya se ha dado, después de que se concluyeran los trabajos en dos tramos que suman 164 kilómetros. El primero discurre entre Motilla del Palancar y La Gineta (Albacete), mientras que el segundo se sitúa entre el citado municipio castellano-manchego y la localidad valenciana de de Siete Aguas.
Las obras de electrificación consisten en llevar el suministro eléctrico de las subestaciones próximas hasta la vía a través de una línea aérea, que se sustenta en la catenaria. La instalación ha incluido elementos de atirantado, compensación y alimentación para que el cable quede fijado y cumpla su objetivo. Tal y como informaron ayer fuentes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), empresa pública que promueve las obras, «la puesta en tensión de la catenaria es una fase previa y necesaria para la futura realización de pruebas de tráfico ferroviario». Eso sí, tras la electrificación y antes de que los primeros trenes laboratorio circulen por el trazado, será necesario concluir otros trabajos en toda la línea, como la instalación de los sistemas de radio y telecomunicaciones o la señalización.
Uno de los problemas a los que se han enfrentado los responsables del AVE de Levante han sido los reiterados robos de cable de cobre en las instalaciones, y precisamente, los trabajos de instalación de la catenaria son los más delicados en lo que se refiere a sustracciones. Sin embargo, desde Adif explicaban ayer que toda la línea cuenta con seguridad privada contratada por las empresas constructoras, mientras que las patrullas de la Guardia Civil también colaboran en las tareas de control. Eso sí, el riesgo disminuye una vez se ha electrificado un tramo, ya que tocar los elementos de la catenaria, que ya tiene electricidad, puede suponer un elevado riesgo de muerte. Además, las citadas fuentes explicaron que fruto del aumento de la vigilancia, se ha conseguido reducir los robos «de manera considerable».
2010 será el año del AVE para la tercera ciudad de España. La previsión es que la Alta Velocidad una la capital con Valencia a finales de año. Entonces, sólo faltará la conexión con Alicante, Murcia y Castellón. Hasta ahora, sólo hay cinco kilómetros de la línea hasta Valencia pendientes de finalizarse, y corresponden al túnel del Regajal, que se hundió parcialmente en diciembre de 2008, y al nudo sur situado a las puertas de Valencia. Esta obra dirigirá los trenes hacia la estación provisional, y en el futuro, hacia el acceso subterráneo definitivo.
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