El director y un administrativo del centro de salud Castilla La Nueva, en Fuenlabrada, fueron agredidos la semana pasada por un paciente"fuera de sí", según ha explicado la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), que recuerda que hace menos de dos meses se produjo otro altercado con los profesionales sanitarios en el centro de El Naranjo de esta misma localidad.
En esa ocasión, tres trabajadoras del centro de salud fueron"salvajemente" atacadas por un usuario que las agredió con un hacha provocándolas "serias lesiones", han apuntado desde la Asociación, que, a su vez, ha denunciado que desde la Consejería de Sanidad no se ha actuado al respecto.
En concreto, la nueva agresión tuvo lugar el pasado 20 de abril, en medio de las vacaciones de Semana Santa, cuando alrededor de las 13.15 horas, un usuario agredió al personal de este centro, en el número 4 de la calle Teruel 4 de Fuenlabrada, y posteriormente, abandonó el lugar.
Fuentes del departamento que dirige Javier Fernández-Lasquetty han señalado que tanto en esta ocasión como en la anterior de El Naranjo, donde el suceso fue más grave, las direcciones de sendos centros han presentado su correspondiente denuncia y que el responsable de Área se ha personado para analizar lo ocurrido.
Además, pese a que desde AMYTS señalan que Sanidad no está haciendo nada, las mismas fuentes explican que en el caso de El Naranjo se colocó una mampara en el mostrador de atención así como una puerta de seguridad que funciona con código y un vigilante jurado, como medida de vigilancia.
En el centro de salud Castilla La Nueva también hay un vigilante de seguridad y se va a instalar una mampara en el mostrador de atención para evitar casos como éste. AMYTS asegura que estas mamparas protectoras fueron retiradas por la Consejería de Sanidad antes de que se produjeran los hechos porque consideró que afeaban el lugar.
Sanidad recuerda que la Dirección General de Recursos Humanos mantuvo diversas reuniones con los sindicatos a raíz de lo sucedido en la primera ocasión y que la más reciente es la celebrada el pasado 14 de abril, cuando se presentó el Plan Unificado de Atención Primaria de Situaciones Conflictivas.
También se llevó a la mesa un mapa de situación conflictiva elaborado por las siete direcciones asistenciales con fin de acordar un circuito para poder denunciar este tipo de agresiones viendo cuáles son además los puntos más conflictivos y seguir instalando mamparas en otros centros de salud, "dando preferencia a los de Fuenlabrada" en función del mapa.
En breve, según la Consejería madrileña, cuando terminen las elecciones sindicales, continuarán reuniéndose en la Mesa Sectorial para seguir trabajando en esta dirección.
Estas medidas 'no han visto la luz'
AMYTS, por su parte, dice que tras la reunión monográfica con las organizaciones sindicales presentes en la Mesa Sectorial de Sanidad, la Consejería prometió adoptar una serie de medidas de protección con carácter de urgencia, "que hasta ahora no han visto la luz".
Desde AMYTS se considera que estas agresiones no constituyen "hechos aislados, sino que corresponden a una realidad que no se puede ignorar". De hecho, recuerdan que el Colegio Oficial de Médicos de la Comunidad de Madrid tienen registradas 1.800 agresiones verbales o físicas al personal sanitario en los últimos doce meses.
En consecuencia, desde esta organización se exige la instalación inmediata de todas las mamparas que han sido retiradas, y la implementación urgente de todas las medidas de protección prometidas (contratación de vigilantes, instalaciones de botones de pánico, formación de los profesionales en esta materia, control y seguimiento de los agresores, entre otras).
AMYTS "ha tratado de paliar estas situaciones en la medida de sus posibilidades", aseguran, al tiempo que han explicado que el pasado 1 de marzo distribuyó en todos los centros sanitarios de la Comunidad de Madrid 10.000 trípticos que bajo el título 'Actuación ante una agresión' donde se informaba a los facultativos del protocolo de actuación que deben seguir ante un episodio de violencia verbal o física.
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