Ni reformas laborales ni recortes salariales nos sacarán de la crisis, sólo la reactivación económica y el cambio de modelo productivo
El paro ha aumentado en 171.243 personas en noviembre, alcanzando casi la barrera de los tres millones de desempleados. Ante el avance del paro, es preciso ampliar la protección frente a la pérdida de empleo, impulsando las políticas activas y mejorando la cobertura económica de los desempleados, así como exigir responsabilidad a la autoridad laboral y a los poderes públicos en las causas que se alegan en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) e intensificar la creación de empleo directo por parte de las Administraciones Públicas, sobre todo la construcción y los servicios. Para el sindicato, es necesario coordinar las actuaciones de las distintas Administraciones para paliar los efectos de la crisis, a través de la convocatoria de una Conferencia conjunta sobre el Empleo y la Industria. UGT considera que para hacer frente a la crisis son necesarias medidas a medio y largo plazo que profundicen en el cambio de modelo productivo, no reformas del mercado de trabajo que abaraten más el despido ni restricciones salariales que ahondarían en la crisis.
El desempleo se eleva considerablemente una vez más en este mes: los datos facilitados por los Servicios públicos de empleo señalan un incremento de 171.243 desempleados registrados más que en el mes anterior, alzando el total de desempleados hasta rozar los tres millones (2.989.269).
De nuevo, el desempleo masculino aumenta en mayor medida que el femenino, reduciéndose el peso porcentual de mujeres desempleadas hasta el 51,6% del total, un punto menos que en el mes de octubre y 8,6 puntos porcentuales por debajo del peso que representaban las mujeres desempleadas hace un año. Sin embargo, esta equiparación entre sexos proviene del fuerte aumento del desempleo masculino.
Entre los jóvenes menores de 25 años, continúa la escalada del desempleo, con 26.437 parados más que en el mes anterior, llegando con ello a representar el 12,9% del desempleo total, dos décimas más que en octubre y 1,3 puntos más que en noviembre de 2007.
El mayor repunte del desempleo registrado en este mes se observa entre los parados extranjeros, con un incremento del 12,5% respecto al mes anterior, de modo que se sitúan en 379.640 desempleados. El porcentaje de parados extranjeros supone por tanto el 12,7% del total de parados, es decir, 7 décimas por encima del dato registrado en el mes anterior y 3,2 puntos más que en noviembre de 2007.
Atendiendo a los datos por sectores, en términos relativos mensuales el número de desempleados crece, sobre todo, en los sectores de la construcción y la industria, y, en menor medida, en la agricultura, los servicios y entre aquéllos desempleados que no tenían empleo anteriormente.
Esta subida en el número de parados, en términos interanuales, afecta de nuevo significativamente al sector de la construcción, aunque el incremento se produce en todos los sectores.
Una vez más, es el sector de la construcción el que sufre en mayor medida el ajuste que se produce en el mercado laboral derivado de las circunstancias económicas, pues se registra un incremento superior al 100% de desempleados respecto al año anterior. Sin embargo, el sector que mayor peso tiene en cuanto a número de desempleados en la economía es el de servicios, aunque haya reducido su participación relativa en más de 3 puntos desde noviembre del año 2007, de forma que los desempleados que se registran en este sector (1.729.579) es aún más significativo.
En el mes de noviembre los contratos registrados llegaron a 1.162.614, descendiendo significativamente con relación al mes pasado y al año anterior. En lo que llevamos de año, la contratación acumulada supera los 15 millones de contratos (15.483.660), lo que refleja un descenso en comparación con los once primeros meses del año 2007.
Los contratos indefinidos se sitúan en el 11,1% del total de contratos. Este porcentaje es apenas 3 décimas menor al del mes pasado, y casi 1 punto porcentual menos que en el mismo mes del año 2007.
Por el contrario, los contratos temporales ascienden hasta el 88,9% del total de contratos registrados, 3 décimas más de lo que representaban en el mes de octubre y 8 más que en el año 2007.
En conclusión:
Atendiendo a los datos registrados por los Servicios Públicos de Empleo, se constata una evolución ascendente del desempleo, afectando a todos los grupos de trabajadores, con especial incidencia entre los jóvenes menores de 25 años y los desempleados extranjeros. Además, el desempleo aumenta en todos los sectores, siendo significativo el incremento constante que se produce en el sector de la construcción, así como en la industria y los servicios, sector que aglutina al mayor número de desempleados.
En cuanto a la contratación registrada, se ha producido un notable descenso, en mayor medida entre los contratos de carácter indefinido, reduciéndose el número total de contratos en más de 400.000 respecto al mes de octubre.
Por ello, en el corto plazo, en la inmediatez que reclama la grave situación del desempleo que reflejan estos datos, además de prestar una atención especial al seguimiento y la vigilancia de las causas alegadas en los expedientes de regulación, de suspensión o extinción de empleo, exigiendo objetividad ante la autoridad laboral, y ante los poderes públicos en general, ha de reforzarse de manera inmediata la protección de los trabajadores frente a las situaciones de desempleo, ya sean derivadas de ERE o de la no renovación o despido de trabajadores individuales.
Deben ampliarse las medidas de protección frente a la pérdida del empleo, a través del impulso de las políticas activas y la mejora de la cobertura económica de los desempleados, tanto en el nivel contributivo como en el asistencial. Resulta necesario asimismo reponer las prestaciones por desempleo que, previamente a la extinción de los contratos, hubieran sido consumidas por los trabajadores afectados por ERE de suspensión temporal.
Mientras tanto, ante la gravedad de la realidad actual, UGT considera que las medidas adoptadas por el Gobierno se encaminan en la buena dirección, aunque sería conveniente intensificar la creación de empleo directo por parte de las Administraciones Públicas, acometiendo medidas urgentes en los sectores de la construcción y los servicios, los más castigados en el contexto actual.
Por ello, resulta imprescindible que se convoque una “Conferencia conjunta sobre el Empleo y la Industria”, donde se completen, ordenen y organicen las medidas adoptadas, que hasta ahora pueden dar una sensación de desconcierto y desorden. Este acuerdo entre las distintas Administraciones Públicas ha de servir para que cada cual asuma sus responsabilidades, se atribuyan las competencias y cada parte disponga la financiación adecuada.
Para hacer frente a la crisis económica a la que nos enfrentamos son necesarias medidas, a medio y largo plazo, de reactivación de la actividad económica que profundicen en el cambio del modelo productivo. Estas medidas nada tienen que ver con reformas laborales (que abaraten aún más el despido), ni con restricciones salariales que, lejos de contribuir a la salida de la crisis, ahondarían más en ella, al deprimir el consumo de las familias.
No es en el mercado de trabajo donde se origina la crisis actual; por tanto, la próxima evolución de la economía no depende del grado de flexibilidad que exista en el mercado de trabajo. En cambio, son las instituciones financieras internacionales y nacionales, los organismos reguladores y los Gobiernos, los que sí tienen responsabilidades en la crisis económica, la pérdida de empleos y el empobrecimiento de la sociedad.
El desempleo se eleva considerablemente una vez más en este mes: los datos facilitados por los Servicios públicos de empleo señalan un incremento de 171.243 desempleados registrados más que en el mes anterior, alzando el total de desempleados hasta rozar los tres millones (2.989.269).
De nuevo, el desempleo masculino aumenta en mayor medida que el femenino, reduciéndose el peso porcentual de mujeres desempleadas hasta el 51,6% del total, un punto menos que en el mes de octubre y 8,6 puntos porcentuales por debajo del peso que representaban las mujeres desempleadas hace un año. Sin embargo, esta equiparación entre sexos proviene del fuerte aumento del desempleo masculino.
Entre los jóvenes menores de 25 años, continúa la escalada del desempleo, con 26.437 parados más que en el mes anterior, llegando con ello a representar el 12,9% del desempleo total, dos décimas más que en octubre y 1,3 puntos más que en noviembre de 2007.
El mayor repunte del desempleo registrado en este mes se observa entre los parados extranjeros, con un incremento del 12,5% respecto al mes anterior, de modo que se sitúan en 379.640 desempleados. El porcentaje de parados extranjeros supone por tanto el 12,7% del total de parados, es decir, 7 décimas por encima del dato registrado en el mes anterior y 3,2 puntos más que en noviembre de 2007.
Atendiendo a los datos por sectores, en términos relativos mensuales el número de desempleados crece, sobre todo, en los sectores de la construcción y la industria, y, en menor medida, en la agricultura, los servicios y entre aquéllos desempleados que no tenían empleo anteriormente.
Esta subida en el número de parados, en términos interanuales, afecta de nuevo significativamente al sector de la construcción, aunque el incremento se produce en todos los sectores.
Una vez más, es el sector de la construcción el que sufre en mayor medida el ajuste que se produce en el mercado laboral derivado de las circunstancias económicas, pues se registra un incremento superior al 100% de desempleados respecto al año anterior. Sin embargo, el sector que mayor peso tiene en cuanto a número de desempleados en la economía es el de servicios, aunque haya reducido su participación relativa en más de 3 puntos desde noviembre del año 2007, de forma que los desempleados que se registran en este sector (1.729.579) es aún más significativo.
En el mes de noviembre los contratos registrados llegaron a 1.162.614, descendiendo significativamente con relación al mes pasado y al año anterior. En lo que llevamos de año, la contratación acumulada supera los 15 millones de contratos (15.483.660), lo que refleja un descenso en comparación con los once primeros meses del año 2007.
Los contratos indefinidos se sitúan en el 11,1% del total de contratos. Este porcentaje es apenas 3 décimas menor al del mes pasado, y casi 1 punto porcentual menos que en el mismo mes del año 2007.
Por el contrario, los contratos temporales ascienden hasta el 88,9% del total de contratos registrados, 3 décimas más de lo que representaban en el mes de octubre y 8 más que en el año 2007.
En conclusión:
Atendiendo a los datos registrados por los Servicios Públicos de Empleo, se constata una evolución ascendente del desempleo, afectando a todos los grupos de trabajadores, con especial incidencia entre los jóvenes menores de 25 años y los desempleados extranjeros. Además, el desempleo aumenta en todos los sectores, siendo significativo el incremento constante que se produce en el sector de la construcción, así como en la industria y los servicios, sector que aglutina al mayor número de desempleados.
En cuanto a la contratación registrada, se ha producido un notable descenso, en mayor medida entre los contratos de carácter indefinido, reduciéndose el número total de contratos en más de 400.000 respecto al mes de octubre.
Por ello, en el corto plazo, en la inmediatez que reclama la grave situación del desempleo que reflejan estos datos, además de prestar una atención especial al seguimiento y la vigilancia de las causas alegadas en los expedientes de regulación, de suspensión o extinción de empleo, exigiendo objetividad ante la autoridad laboral, y ante los poderes públicos en general, ha de reforzarse de manera inmediata la protección de los trabajadores frente a las situaciones de desempleo, ya sean derivadas de ERE o de la no renovación o despido de trabajadores individuales.
Deben ampliarse las medidas de protección frente a la pérdida del empleo, a través del impulso de las políticas activas y la mejora de la cobertura económica de los desempleados, tanto en el nivel contributivo como en el asistencial. Resulta necesario asimismo reponer las prestaciones por desempleo que, previamente a la extinción de los contratos, hubieran sido consumidas por los trabajadores afectados por ERE de suspensión temporal.
Mientras tanto, ante la gravedad de la realidad actual, UGT considera que las medidas adoptadas por el Gobierno se encaminan en la buena dirección, aunque sería conveniente intensificar la creación de empleo directo por parte de las Administraciones Públicas, acometiendo medidas urgentes en los sectores de la construcción y los servicios, los más castigados en el contexto actual.
Por ello, resulta imprescindible que se convoque una “Conferencia conjunta sobre el Empleo y la Industria”, donde se completen, ordenen y organicen las medidas adoptadas, que hasta ahora pueden dar una sensación de desconcierto y desorden. Este acuerdo entre las distintas Administraciones Públicas ha de servir para que cada cual asuma sus responsabilidades, se atribuyan las competencias y cada parte disponga la financiación adecuada.
Para hacer frente a la crisis económica a la que nos enfrentamos son necesarias medidas, a medio y largo plazo, de reactivación de la actividad económica que profundicen en el cambio del modelo productivo. Estas medidas nada tienen que ver con reformas laborales (que abaraten aún más el despido), ni con restricciones salariales que, lejos de contribuir a la salida de la crisis, ahondarían más en ella, al deprimir el consumo de las familias.
No es en el mercado de trabajo donde se origina la crisis actual; por tanto, la próxima evolución de la economía no depende del grado de flexibilidad que exista en el mercado de trabajo. En cambio, son las instituciones financieras internacionales y nacionales, los organismos reguladores y los Gobiernos, los que sí tienen responsabilidades en la crisis económica, la pérdida de empleos y el empobrecimiento de la sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario