Cuenca, 13 sep (Cuenca).- Un equipo de seguridad privada velará un año más para que todo transcurra con normalidad durante las fiestas de San Mateo, entre el 18 y el 21 de septiembre, sobre todo durante la celebración de las vaquillas enmaromadas que se sueltan por las calles del casco antiguo de la capital.
Según ha explicado hoy la concejal de Festejos, Nieves Mohorte, el plan contempla la contratación de seguridad privada para vigilar la barrera de la Plaza Mayor y el acceso a la verbena que se desarrollará en la Plaza de Ronda todos los días, salvo el 17.
Según la concejal, el bar de la verbena se instalará en la Plaza de L'Aquila (algo más abajo), al igual que el año pasado, aunque finalmente no se respetó esta decisión.
Se da la circunstancia que la verbena se volverá a celebrar en la plaza de Ronda y no en la plaza Mayor como habían pedido los peñistas dado que el espacio se queda pequeño y existen, a veces, problemas para acceder.
La única verbena que se celebrará en la emblemática plaza del casco antiguo, declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad, será la del 17, sufragada por las peñas mateas un día antes del inicio de las fiestas.
Para garantizar la salubridad, este año se van a instalar de nuevo un total de veinticuatro urinarios portátiles, además de los servicios públicos de la calle Zapaterías que estarán abiertos hasta la medianoche.
El desfile de las 50 peñas inscritas, que en total suman 6.500 personas, será sobre las 11.00 horas del próximo domingo 18 de septiembre, y a su término, sobre las 13.00 horas tendrá lugar el pregón de Manuel Moraleja, ex presidente de las peñas mateas, quien hoy en rueda de prensa ha adelantado que ya lo tiene redactado.
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