El secretario general de la Federación de Servicios de UGT-Madrid, Roberto Tornamira, ha denunciado hoy en un comunicado que la plantilla de vigilantes del cementerio de Carabanchel va a pasar de 5 personas diarias a una sola, mientras que en el de la Almudena ya se ha pasado de seis trabajadores diarios a dos.
Estos recortes, según Tornamira, también afectarán a los tanatorios de la M-30 y el tanatorio Sur, en los que se reduce un 50 por ciento el número de efectivos.
"Parece ser que se va a sustituir a los vigilantes por cámaras de seguridad y según comentan los trabajadores de seguridad no habrá personas encargadas de controlar estas cámaras en tiempo real, por lo que en caso de incidente no habrá nadie para intervenir o avisar a la policía", advierte el dirigente de UGT-Madrid.
El sector de seguridad privada de la Federación de Servicios de UGT-Madrid rechaza "totalmente" esta medida, que "una vez más hacer recaer el peso de los ajustes económicos, de un ayuntamiento despilfarrador, en los trabajadores y ciudadanos", concluye la nota.
EFE
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