1 de diciembre de 2008, Día Mundial Lucha contra el SIDA
UGT aboga por el desarrollo en las empresas de programas de salud en el trabajo que integren tanto la formación como las actividades de prevención del VIH/SIDA, con el objetivo de lograr que tanto empresas como trabajadores perciban la enfermedad como parte del ámbito laboral.
El sindicato, con motivo de la celebración mañana del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, reitera que continuará velando para que no se produzcan situaciones de discriminación, incluida la práctica ilegal de algunas empresas de realizar análisis para la detención de VIH, como requisito indispensable para permanecer o acceder a un puesto de trabajo.
Este año se conmemoran los 20 años de celebración del día 1 de diciembre como día mundial de lucha contra el SIDA. Fue en 1988 cuando la Organización de las Naciones Unidas, debido a la preocupación por el hecho de que el Síndrome tomaría proporciones de epidemia, cuando decidió dedicar un día a la enfermedad y se eligió el primer día de diciembre porque el primer caso diagnosticado de SIDA fue en este día en 1981.
UGT ha considerado necesario, desde siempre, proteger de una manera especial a los trabajadores del riesgo de contraer esta enfermedad, pero fundamentalmente debemos luchar para que sus derechos no se vean vulnerados en caso de haberla contraído. Debemos ampliar la capacidad de percepción de los trabajadores respecto al riesgo de contraerla. No hay que olvidar que la mayoría de los más de 33 millones de personas que viven en el mundo con VIH/SIDA trabaja y tiene unas cualificaciones y una experiencia, cuya pérdida no puede permitirse ninguna empresa.
Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT), muchos trabajadores no saben lo suficiente del VIH para protegerse a sí mismos, por lo que es difícil que se modifiquen conductas para atenuar el riesgo de infección. El cambio de conducta es una forma de educación participativa que anima a los interesados a comprender sus propias actitudes respecto al VIH y a evaluar sus propios riesgos, y que les motiva a modificar su comportamiento.
Para el sindicato, a través del diálogo y la formación se debe reforzar la capacidad de las Administraciones y organizaciones sindicales y empresariales, para proteger a los trabajadores de esta enfermedad y atenuar su impacto en el ámbito laboral. Debemos utilizar los centros de trabajo para la prevención, atención y asistencia, así como para vigilar que no se produzca la estigmatización y la discriminación de trabajadores por esta enfermedad.
UGT defiende el mantenimiento del empleo de los trabajadores que viven con la enfermedad y lucha por eliminar cualquier discriminación social y laboral. Junto a ello, se debe informar para reducir las conductas que puedan suponer un alto riesgo y facilitar la derivación a los servicios sanitarios públicos para el acceso a pruebas, tratamiento, cuidados y medidas de apoyo, todo ello, con confidencialidad. La empresa debería contar con un programa de salud en el trabajo que integre tanto la formación como las actividades de prevención y actuación ante el SIDA. De esta manera, se percibirá tanto por la empresa como por los trabajadores, como algo que no es ajeno al ámbito laboral y su tratamiento implicará a ambos.
El sindicato considera que reconocer el VIH/SIDA como una cuestión relevante en el centro de trabajo es fundamental, de cara a prevenir su aparición, prestar el apoyo y atención necesarios para acceder a los tratamientos y servicios, y ante todo evitar cualquier discriminación en el acceso al empleo por razón de la enfermedad o la pérdida del mismo. En cualquier caso, para aquellos trabajadores que hayan desarrollado la enfermedad, se establecerán medidas para adaptar los puestos de trabajo a las nuevas circunstancias, pausas de descanso y tiempo libre para consultas médicas.
Para UGT es básico el conocimiento por parte de todos los trabajadores, que está expresamente prohibido la realización de análisis para la detección del VIH, por lo que ningún trabajador debe permitir su realización. Desde nuestro Sindicato continuaremos velando para que no se produzca la práctica ilegal y encubierta que se da en algunas empresas donde la obligatoriedad de una prueba de detección de VIH/SIDA, es requisito indispensable para pasar a formar parte de la plantilla o permanecer en ella.
El sindicato, con motivo de la celebración mañana del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, reitera que continuará velando para que no se produzcan situaciones de discriminación, incluida la práctica ilegal de algunas empresas de realizar análisis para la detención de VIH, como requisito indispensable para permanecer o acceder a un puesto de trabajo.
Este año se conmemoran los 20 años de celebración del día 1 de diciembre como día mundial de lucha contra el SIDA. Fue en 1988 cuando la Organización de las Naciones Unidas, debido a la preocupación por el hecho de que el Síndrome tomaría proporciones de epidemia, cuando decidió dedicar un día a la enfermedad y se eligió el primer día de diciembre porque el primer caso diagnosticado de SIDA fue en este día en 1981.
UGT ha considerado necesario, desde siempre, proteger de una manera especial a los trabajadores del riesgo de contraer esta enfermedad, pero fundamentalmente debemos luchar para que sus derechos no se vean vulnerados en caso de haberla contraído. Debemos ampliar la capacidad de percepción de los trabajadores respecto al riesgo de contraerla. No hay que olvidar que la mayoría de los más de 33 millones de personas que viven en el mundo con VIH/SIDA trabaja y tiene unas cualificaciones y una experiencia, cuya pérdida no puede permitirse ninguna empresa.
Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT), muchos trabajadores no saben lo suficiente del VIH para protegerse a sí mismos, por lo que es difícil que se modifiquen conductas para atenuar el riesgo de infección. El cambio de conducta es una forma de educación participativa que anima a los interesados a comprender sus propias actitudes respecto al VIH y a evaluar sus propios riesgos, y que les motiva a modificar su comportamiento.
Para el sindicato, a través del diálogo y la formación se debe reforzar la capacidad de las Administraciones y organizaciones sindicales y empresariales, para proteger a los trabajadores de esta enfermedad y atenuar su impacto en el ámbito laboral. Debemos utilizar los centros de trabajo para la prevención, atención y asistencia, así como para vigilar que no se produzca la estigmatización y la discriminación de trabajadores por esta enfermedad.
UGT defiende el mantenimiento del empleo de los trabajadores que viven con la enfermedad y lucha por eliminar cualquier discriminación social y laboral. Junto a ello, se debe informar para reducir las conductas que puedan suponer un alto riesgo y facilitar la derivación a los servicios sanitarios públicos para el acceso a pruebas, tratamiento, cuidados y medidas de apoyo, todo ello, con confidencialidad. La empresa debería contar con un programa de salud en el trabajo que integre tanto la formación como las actividades de prevención y actuación ante el SIDA. De esta manera, se percibirá tanto por la empresa como por los trabajadores, como algo que no es ajeno al ámbito laboral y su tratamiento implicará a ambos.
El sindicato considera que reconocer el VIH/SIDA como una cuestión relevante en el centro de trabajo es fundamental, de cara a prevenir su aparición, prestar el apoyo y atención necesarios para acceder a los tratamientos y servicios, y ante todo evitar cualquier discriminación en el acceso al empleo por razón de la enfermedad o la pérdida del mismo. En cualquier caso, para aquellos trabajadores que hayan desarrollado la enfermedad, se establecerán medidas para adaptar los puestos de trabajo a las nuevas circunstancias, pausas de descanso y tiempo libre para consultas médicas.
Para UGT es básico el conocimiento por parte de todos los trabajadores, que está expresamente prohibido la realización de análisis para la detección del VIH, por lo que ningún trabajador debe permitir su realización. Desde nuestro Sindicato continuaremos velando para que no se produzca la práctica ilegal y encubierta que se da en algunas empresas donde la obligatoriedad de una prueba de detección de VIH/SIDA, es requisito indispensable para pasar a formar parte de la plantilla o permanecer en ella.
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