Grupos de jóvenes practican desde hace tiempo botellón en el Metro de Madrid, una modalidad de ingesta de alcohol que se ha extendido en las últimas semanas ante el brusco descenso de las temperaturas y ante el aumento de denuncias 'en la superficie'.
El botellón en el suburbano se concentra generalmente las noches de jueves, viernes y sábados a partir de las 22 horas, cuando cientos de jóvenes se mueven por los convoyes para salir de fiesta o concentrarse junto a los amigos en alguna plaza o parque.
Entonces, con los hielos y vasos de tubo recién comprados, sacan la bebida e ingieren alcohol en un ambiente distendido con amigos. Una práctica que generalmente se acompaña de chillidos, música de los móviles a todo volumen y cigarrillos, lo que suele molestar a los otros usuarios del Metro.
Las líneas que normalmente utilizan estos particulares viajeros son la 1, la 10, la Circular y Metrosur, ya que sus paradas de destino frecuentes son Ciudad Universitaria, Metropolitano, Moncloa y algunas del Centro y sur de la región típicas de marcha.
La ingesta de bebidas alcohólicas está prohibida en el suburbano, pero los vigilantes de seguridad no tienen potestad para multar o requisar estas bebidas, tal y como realizan los agentes municipales. A pesar de que esta práctica es conocida por los guardas de seguridad y por el servicio de la limpieza, puesto que tienen que recoger los restos del botellón, desde Metro han señalado que no se producen apenas quejas ni reclamaciones por este motivo.
Entonces, con los hielos y vasos de tubo recién comprados, sacan la bebida e ingieren alcohol en un ambiente distendido con amigos. Una práctica que generalmente se acompaña de chillidos, música de los móviles a todo volumen y cigarrillos, lo que suele molestar a los otros usuarios del Metro.
Las líneas que normalmente utilizan estos particulares viajeros son la 1, la 10, la Circular y Metrosur, ya que sus paradas de destino frecuentes son Ciudad Universitaria, Metropolitano, Moncloa y algunas del Centro y sur de la región típicas de marcha.
La ingesta de bebidas alcohólicas está prohibida en el suburbano, pero los vigilantes de seguridad no tienen potestad para multar o requisar estas bebidas, tal y como realizan los agentes municipales. A pesar de que esta práctica es conocida por los guardas de seguridad y por el servicio de la limpieza, puesto que tienen que recoger los restos del botellón, desde Metro han señalado que no se producen apenas quejas ni reclamaciones por este motivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario