Un grupo organizado de ladrones profesionales protagonizó la madrugada del viernes al sábado el robo del año en el centro comercial Peñacastillo. Como si de una película de Hollywood se tratase, los delincuentes esperaron hasta que el centro cerrase, los empleados se fueran a su casa y todo quedase en silencio y a oscuras. Ya de madrugada, subieron hasta el tejado del centro comercial y rompieron los cristales que forman la bóveda de la galería comercial. Bajaron con cuerdas y sonó la alarma.
Según fuentes de la investigación, un equipo de guardias de seguridad se trasladó entonces hasta allí, pero no oyeron ni vieron nada que les hiciera sospechar. Tras marcharse los vigilantes, los ladrones tuvieron toda la noche por delante para desvalijar prácticamente todos los establecimientos de la galería comercial.
La suma de dinero que se llevaron, aunque está por confirmar, se supone muy elevada ya que en uno de los comercios sustrajeron 12.000 euros..
Antecedentes
No es la primera vez que este centro comercial sufre un robo de grandes dimensiones. En el año 2001, cuatro hombres armados con pistolas, y a cara descubierta, estrellaron su coche -un BMW- contra la puerta principal de la joyería ubicada en esta galería comercial. Los asaltantes intimidaron a varios empleados con sus armas y emplearon un mazo para reventar las vitrinas. En sólo 2 minutos y 52 segundos cogieron el botín y huyeron.
Casi una década antes, en 1992, cuatro miembros de la organización terrorista Grapo robaron un furgón blindado que transportaba la recaudación del centro comercial. Sin embargo, tras una persecución por los alrededores del recinto, en la que se desencadenó un tiroteo espectacular, los terroristas fueron detenidos.
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