miércoles, 16 de diciembre de 2009

El Ministerio fiscal solicita que un vigilante de seguridad de una discoteca móvil de A Laracha (Arteixo) acusado de agredir a uno de los clientes sea condenado a pagar una multa de 600 euros.





El Ministerio fiscal solicita que un vigilante de seguridad de una discoteca móvil de A Laracha (Arteixo) acusado de agredir a uno de los clientes sea condenado a pagar una multa de 600 euros. La víctima aseguró ayer durante el juicio que el procesado le asestó un golpe en la espalda tras preguntarle si lo conocía de algo. "Después de hablar conmigo me sacó fuera con uno de sus compañeros y empezó la pelea", comentó el perjudicado, quien admitió que durante la trifulca propinó algunos puñetazos. "Hice lo que pude. A mí me pegaron sobre todo en la cara. No lo conocía a él ni al resto de vigilantes", aseguró la víctima, quien insistió en que el sospechoso fue una de las personas que lo agredieron.

El imputado, que estuvo asistido por el letrado José Ramón Sierra, negó que trabajase como personal de seguridad del establecimiento y afirmó que ese día era su hermano el que prestaba sus servicios en la discoteca. "No lo conozco de nada. La pelea la empezó él y yo me defendí", declaró el acusado, para el que la acusación particular exige el pago de una multa de 720 euros por cometer un delito de lesiones y de una indemnización de 1.400 euros.

El representante del Ministerio público pide a la magistrada que lo condene a abonarle a la víctima 1.050 euros por los daños que le ocasionó. La defensa del procesado solicitó su libre absolución.

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