Oviedo
El ajuste que el Principado debe hacer en sus cuentas, y aunque aún está por cuantificar, ha comenzado a dejarse sentir en ciertos servicios externalizados, como es el de la seguridad privada en los centros de salud. Así, los usuarios de estos centros y algunos responsables de las empresas de seguridad contratadas por el Principado han constatado cómo se ha reducido la presencia de vigilantes en varios centros de primaria. De esta forma se ha cancelado la presencia de guardas de seguridad de forma permanente, al menos en los turnos de noche, en este tipo de equipamientos. A cambio, un solo vigilante hace rondas de centro en centro de la misma área sanitaria en coche. A la espera de conocer cuál será la cantidad que el Principado deberá recortar del Presupuesto de este año tras las medidas contra el déficit aprobadas el viernes por el Consejo de Ministros, la Administración regional ya trata de contener el gasto dependiente de la Consejería de Sanidad, que es la de mayor peso en las cuentas regionales. Hasta las medidas del viernes el Principado estaba obligado a recortar 149 millones. Ahora la cifra crecerá.
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