- • La rápida actuación de los Mossos permitió el arresto de los atracadores
- • Dos ladrones retuvieron a unas empleadas durante unos 15 minutos
- Una de las rehenes es atendida tras finalizar el atraco. Foto: ÁLVARO MONGE
BARCELONA
Se acercaban las diez de la noche y, como cada final de jornada, los empleados del Mercadona de la calle del Consell de Cent estaban a punto de salir del local. Sin embargo, de repente se oyeron unos gritos procedentes del interior del estableciento. «Oíamos que un compañero gritaba: ‘llamad a la policía, llamad a la policía’», explicó una de las empleadas. En ese momento, dos atracadores, uno blandiendo una pistola y el otro un cuchillo de grandes dimensiones, aparecieron reteniendo a dos empleadas del local.
El resto de empleados salieron en tropel, espoleados por Rafa, un taxista que venía a buscar a su novia, empleada en el local, y que había trabajado de vigilante. «Le dije a todo el mundo que saliera y, cuando estaban fuera, llamé a los Mossos por la emisora del taxi», señaló con la respiración aún agitada y sosteniendo en la mano una linterna de grandes dimensiones.
El marido de otra de las trabajadoras destaca como «en un par de minutos la calle estaba llena de coches de los Mossos». Al ver llegar a la policía, los atracadores intentaron sin éxito huir forzando la puerta del almacén con un portapalés.
HERIDA LEVE EN EL BRAZO / Cuando la policía llegó al local, un primer grupo de agentes se adentró en el supermercado para determinar cuál era la situación y saber qué armas tenían los atracadores. Al ver los agentes que la pistola era simulada, un amplio grupos de agentes provistos de chalecos antibalas irrumpieron en el recinto reduciendo rápidamente a los atracadores. Una de las rehenes tuvo que ser atendida pues sufrió un ataque de nervios por la extrema tensión de la situación vivida. Otra resultó levemente herida en el brazo debido a la violencia con que el atracador la agarró para evitar que huyera con sus compañeras.
Fuentes de los Mossos señalaron que los dos atracadores son españoles y que ambos han sido trasladados a la comisaría de Les Corts acusados de un delito de robo con violencia. Es posible que la toma de rehenes haga que se les acuse de detención ilegal.
SENTIRSE OBSERVADOS / Los familiares de algunos empleados explicaron que hacía días que algunos de ellos tenían la sensación de que había individuos observando de forma sospechosa el establecimiento, que carecía de seguridad privada. Fuentes de la cadena de supermercados señalaron que, a diferencia de otros locales que sí tienen guardas de seguridad, en este no se habían desplegado pues no se había producido ningún incidente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario