Vigilantes del atunero bermeano 'Campolibre Alai' repelen a tiros otro intento de secuestro en aguas del Índico
26.05.10 - 02:07 -
IRATXE AIASTUI | GERNIKA.
El atunero 'Campolibre Alai', en la imagen escoltado por la fragata 'Numancia', ya fue atacado en septiembre de 2009. :: EFE
La flota vasca que faena en el Océano Índico vuelve a estar en alerta máxima. Tras faenar en «relativa» calma durante las últimas semanas, -el anterior ataque pirata se produjo en marzo contra el 'Txori Argi'- ayer, el 'Campolibre Alai', atunero perteneciente a la empresa Echebastar Fleet de Bermeo, volvió a sufrir el acoso de los bandidos somalíes. Se acabo la tregua.
Por suerte, los tres vigilantes privados que lleva a bordo el buque consiguieron repeler a tiros el intento de abordaje por parte de un esquife. Eran alrededor de las ocho de la mañana, hora española -tres más en el Índico- y navegaban en esos momentos en la situación 13 grados latitud Sur y 46 grados y 45 minutos longitud Este. Aproximadamente, a 70 millas de la isla Mayotte, situada en el extremo norte del Canal de Mozambique, en el archipiélago de las Comoras. Una zona, en principio, considerada como segura por la flota.
El patrón detectó la presencia de una barcaza blanca sospechosa a escasa distancia y tras realizar algunas maniobras evasivas se disiparon todas sus dudas. Eran piratas y venían a por ellos. Rápidamente hizo sonar la sirena del barco para anunciar del peligro a la treintena de hombres que conforman la tripulación y éstos buscaron refugio en el interior de la nave.
«Estamos de maniobras para alejarnos de ellos lo más posible», relataban desde el puente de mando a DV, pocos minutos después de iniciarse el ataque. Los piratas les persiguieron durante más de 40 interminable minutos e incluso llegaron a acercarse a una milla. En ese momento de máxima tensión, los vigilantes privados del 'Campolibre Alai' lanzaron varias ráfagas de advertencia que consiguieron disuadir a los asaltantes. La empresa armadora destacó que «el plan de contingencia ha funcionado correctamente y se ha podido salir de la zona, sin lamentar daños personales». Una vez superado el susto, los tripulantes se pusieron en contacto telefónico con sus familiares para tranquilizarles.
No es la primera vez que el atunero de la compañía Echebastar Fleet, firma a la que también pertenece el 'Alakrana', que el pasado año permaneció secuestrado durante 47 días a manos de una banda piratas somalíes, sufre un episodio de este tipo. El 7 de septiembre de 2009 también fue atacado a 460 millas de la costa de Somalia cuando se dirigía hacia una baliza para comprobar los cardúmenes de pescado.
Por otra parte, ayer mismo, el buque francés de la Fuerza Naval Europea (EU Navfor) liberó al mercante 'Nordenptun', que había sido secuestrado una hora antes cerca de las aguas territoriales de Tanzania. Asimismo, ayer se inició también en Rotterdam el primer juicio que se celebra en Europa contra piratas somalíes, en el caso de cinco sospechosos que en 2009 atacaron a un buque con bandera de Antillas holandesas en el Golfo de Adén.
Los asaltante, que en su momento reconocieron que tenían intención de secuestrar el mercante 'Samanyulo', se retractaron de su confesión al asegurar que «se encontraban pescando cuando debido a algunos problemas en su barco decidieron acercarse al 'Samanyolu' para pedir ayuda». Según fuentes del Ministerio Fiscal de Holanda, los procesados podrían enfrentarse a una pena de entre 9 y 12 años de cárcel
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